En medio del debate entre el oficialismo y la oposición por la comisión investigadora sobre las horas posteriores al terremoto y maremoto del 27 de febrero de 2010, el ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet, aseveró que el Ejecutivo no es parte de la ofensiva.

"Quiero insistir en la postura del gobierno. Aquí hay una función fiscalizadora, la cumple la Cámara de Diputados, y el gobierno tiene que respetar esa actuación le guste o no le guste. Hay cosas que le gusten más al gobierno, cosas que le gustan menos, pero es una función institucional y quiero insistir en eso", dijo en entrevista con Radio Agricultura.

Si bien Larroulet evitó referirse a las declaraciones del vocero de Gobierno Andrés Chadwick -las que fueron cuestionadas por la oposición-, dijo que "hay que ser muy respetuosos de las instituciones". 

"La Cámara de Diputados tiene como tarea la obligación de fiscalizar y en ese sentido se creó una comisión de fiscalización, y uno tiene que respetar la autonomía de los poderes" agregó el secretario de Estado.

El titular de la Segpres hizo hincapié en que "sobre todo nosotros, como Ejecutivo, en esa materia lo que nos corresponde es diferenciar claramente: Esta no es una acción del Ejecutivo, es de los diputados. Y es legítimo que sea así, sobre todo en una situación donde murieron chilenos y es muy importante, sobre todo, sacar lecciones para corregir".

POSIBLES MANIFESTACIONES EN DISCURSO DEL 21 DE MAYO

El ministro Larroulet se refirió además a las gestiones que se encuentra desplegando el gobierno para evitar que se produzcan manifestaciones tanto en la sala, como en las tribunas durante el discurso del 21 de mayo.

Respecto de las advertencias de los parlamentarios de la oposición, quienes han deslizado la posibilidad de ingresar pancartas en rechazo a la ofensiva contra Bachelet, Larroulet expresó que "espero que este año los propios parlamentarios tengan mucho cuidado en que no se invite a personas que quieren causar violencia o disturbios". 

Junto con ello, dijo que "entiendo que tanto el presidente del Senado como el presidente de la Cámara han hablado con las bancadas y han sido muy claros en que se va a aplicar el reglamento. Estoy consciente que hay riesgos, pero espero que ese día se respete esta tradición republicana y no se altere el orden".

"El ánimo del gobierno es mucha confianza. En la vida uno tiene que estar consciente de lo central, y lo principal es el mandato constitucional de dar cuenta", finalizó.