A días de que el gobierno ingrese al Congreso los proyectos de fin al lucro, selección y financiamiento compartido, las autoridades del Mineduc siguen trabajando en lo que prometen será el cambio al corazón del actual sistema escolar. El objetivo es cambiar el paradigma y pasar de un sistema donde los colegios eligen a sus alumnos a uno donde las familias escojan el establecimiento.

Una modificación que no ha estado ajena a cuestionamientos, como, por ejemplo, qué pasará con la libertad de enseñanza.

Según trascendió, el ministro Nicolás Eyzaguirre, junto a otros actores del gobierno, han dado a conocer a un grupo de expertos, parlamentarios e incluso a la Iglesia cómo sería el nuevo modelo para terminar con la selección y segregación escolar en el país. La tarea principal, explican, es conquistar a la Iglesia, ya que su apoyo será esencial para llevar a cabo la reforma.

Actualmente, el país tiene un sistema de admisión escolar universal, donde las familias pueden elegir cualquier recinto a nivel nacional, según su capacidad de pago, ya sea municipal, subvencionado o particular pagado. Según la Ley General de Educación (LGE), los colegios pueden seleccionar a alumnos sólo a partir de séptimo básico.

Sin embargo, la evidencia muestra que esto no se cumple, sobre todo a nivel subvencionado. Según Felipe Salazar, académico de la U. Diego Portales, "se supone que no se puede seleccionar, pero los colegios lo hacen, por ejemplo, por medio del proyecto educativo. Entonces, las familias están obligadas a aceptarlo o no, pero si el sostenedor no quiere atender a cierto tipo de niños, los excluye del proyecto".

La opinión fue firmemente compartida, hace algunos días, por el ministro Eyzaguirre: "El sistema no selecciona a los niños, sino que a sus familias. (...) No agrupan a los niños según vocaciones o talento; lo que hacen es separarlos según la capacidad económica y capital cultural de los padres".

OPCIONES DEL MINEDUC

Es por esta realidad que el Mineduc pretende retirar la posibilidad de que las escuelas seleccionen a los alumnos y trasladar la decisión a un organismo externo, tal como hacen países como Estados Unidos (Nueva York y Washington), Inglaterra y Bélgica. La idea es crear un "sistema ciego", donde las familias postulen de forma presencial y online a los colegios de acuerdo a sus preferencias y sin ninguna barrera de entrada. Un sistema similar al de la PSU, que administra el Demre.

Según trascendió, el fin a la selección se aplicará a todos los colegios que reciban subvención de parte del Estado (municipales y subvencionados) y partiría como piloto en una región del país y de manera gradual. Es decir, con cursos de entrada, como podrían ser prekínder o primero básico, niveles donde se producen las mayores discriminaciones, según los estudios.

¿Qué pasa si un recinto tiene sobredemanda? Para solucionar esto, se barajan opciones como utilizar el azar, por medio de una tómbola, por ejemplo, o usando criterios de selección que les den mayor preferencia a algunas familias. Estos criterios son, por ejemplo, considerar si el postulante tiene un hermano o vive cerca del recinto. Si bien sobre este tema hay acuerdos entre los asesores del Mineduc, la decisión final dependerá del consenso político que por estos días busca el gobierno entre los partidos y la Iglesia.

LOS EMBLEMATICOS

Las autoridades del Mineduc aún no tienen claridad de cómo podrían terminar con la selección en colegios como el Instituto Nacional y el Carmela Carvajal. Lo que tienen claro es que se debe terminar con este tipo de mecanismos en el país, pero saben -según trascendió- que es un tema que genera división entre los parlamentarios.

Desde el Mineduc se contemplan distintas opciones. Entre ellas, eliminar la selección en esos recintos de forma gradual, "de aquí a un par de años", o mantenerlos con un sistema distinto de selección que contemple otras variables, además de las notas y el examen de ingreso.