La Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Aysén aprobó en forma unánime la construcción de la Central Cuervo, que se ubicará en el río del mismo nombre a 46 kilómetros de Puerto Aysén. Salvo algunas observaciones realizadas por la intendenta Pilar Cuevas, el proyecto fue aprobado en su totalidad, sin embargo, sus detractores critican que esté emplazado sobre la falla geológica Liquiñe-Ofqui, lo que "no asegura la integridad de los habitantes de Aysén".

Energía Austral destaca en su sitio web que la Central Cuervo contempla la construcción de dos presas de hormigón, emplazadas en cada uno de los brazos del río Cuervo, que formarán el embalse, el cual se unirá a los lagos Yulton y Meullín. Esta construcción inundará un área de 5 mil 863 hectáreas.

La capacidad instalada de Central Cuervo alcanzará los 640 mega watts, energía que será inyectada al Sistema Interconectado Central.

La central hidroeléctrica además contempla una inversión de US$733 millones, y se estima que su construcción tome 56 meses, con una vida útil indefinida.

FALLA VOLCANICA

Los detractores de la iniciativa, entre los que se encuentran los grupos ambientalistas como Patagonia sin Represas y el senador RN Antonio Horvath, señalan que en la aprobación del proyecto no se tomó en cuenta el riesgo que corren los habitantes de Puerto Aysén, debido a la cercanía con la hidroeléctrica y a que será construída sobre la falla geológica "más grande de Chile".

"Esta central se pretende ubicar sobre la falla geológica más grande de Chile, por lo tanto aquí se está poniendo en riesgo a la población", señaló el senador Horvath. Una opinión similar tiene el vocero de Patagonia sin Represas, Patricio Segura, quien agregó que el proyecto se aprobó "a pesar de los informes técnicos y lo que señala Sernageomin, se pone en riesgo a las personas", y enfatizó que "hay estudios técnicos que no aseguran la integridad física de la gente de Puerto Aysén".

Al respecto, la empresa señala en su sitio web que "central Cuervo está diseñada sobre ramificaciones terciarias y no sobre la falla principal, situación que es común a otras construcciones de ésta y otra naturaleza en Chile".

Si bien los ecologistas y detractores del proyecto no se oponen tajantemente a la construcción de hidroeléctricas en la Región de Aysén, piden que se reformulen los proyectos, dando paso a otros nuevos que sean más amigables con el medio ambiente, mientras anuncian nuevas movilizaciones y recursos legales que impidan la construcción de la Central Cuervo.