El escenario actual es así: Julio Barroso recibió ocho partidos de suspensión por infracción al artículo 68e del Código de Procedimiento y Penalidades de la ANFP. Esta sanción lo inhabilita para jugar este sábado ante Santiago Wanderers y también una eventual definición ante Universidad de Chile; es decir, quedaría fuera de los dos duelos más importantes de Colo Colo en el torneo.

Suena terrible para el Cacique y sus pretensiones de bicampeonato, pues no contar con uno de sus jugadores más importantes es demasiada ventaja, sobre todo cuando se tiene un plantel corto como el actual.

Sin embargo, el panorama, que parece ser muy oscuro para los albos, dista mucho del posible escenario futuro. O, por lo menos, del que esperan en Blanco y Negro. Esto, porque desde la sociedad anónima aseguraron que apelarán a la sanción mediante un escrito, el cual integrará una orden de no innovar, "con el objeto de que el proceso tenga el debido trámite en la Segunda Sala del Tribunal buscando la absolución de nuestro jugador", informaron a través de un comunicado.

En el fondo, los abogados del club tienen plena confianza en que el organismo concederá la orden de no innovar, la que será presentada durante esta jornada, por lo que el castigo a Barroso quedaría en suspenso.

En rigor, la Segunda Sala tiene dos días para aceptar o rechazar la orden de no innovar, y cinco días hábiles, a contar del día de la apelación, para fallar. De esta forma, a más tardar el jueves se conocerá, concretamente, si el zaguero argentino tendrá la oportunidad de frenar los ataques de Roberto Gutiérrez y compañía.

Dos aspectos principales contendrá la apelación de Barroso que presentarán los abogados de ByN. El primero tiene que ver con su irreprochable conducta anterior, "habiendo sido expulsado sólo una vez en toda su carrera", indicó la defensa, según el fallo. Mientras que el segundo ítem buscará establecer que el central jamás tuvo ánimo de ofender o injuriar a alguien.

CAMBIO DE PLANES

Si bien Barroso jugaría ante los caturros y, eventualmente, ante la U, la apelación podría costarle caro, pues la Segunda Sala tiene facultad para disminuir o aumentar el castigo. Y el máximo de partidos de suspensión que establece el 68e es de 50.

Como sea, el técnico Héctor Tapia, al igual que el plantel, recibió con desagrado la noticia. "No veo por qué tengan que castigarlo", sostuvo la semana pasada.

Su molestia va más allá del riesgo de no tenerlo ante los verdes, ya que pretendía incorporar para el próximo torneo a dos delanteros y un volante. Ahora, ante la chance de que Barroso se pierda ocho partidos (o más) en el Clausura 2015, deberá tener un plan B.

Al respecto, en Macul se contactaron con Oscar Sosa, agente de Paulo da Silva. "Tuvimos una conversación. Preguntaron si Paulo querría ir a Colo Colo. Es un equipo grande y sería un orgullo jugar ahí, así que les pedí una propuesta con el membrete del club para presentarla en Toluca", reveló el agente del paraguayo.