Un nuevo estudio realizado en China ha revelado que al comer comidas picantes, las personas reducen su consumo de sal y por tanto, tienen una presión arterial más baja de aquellos que disfrutaban comidas no picantes.
De acuerdo al estudio, mientras más disfrutaban las personas de los sabores picantes, más sensibles eran a lo salado y menor era su umbral para considerar algo "muy salado". En promedio, indican en el estudio, estas personas consumen 2.5 gramos de sal menos que el resto.
Al escanear el cerebro de 600 voluntarios que participaron en el estudio, los investigadores encontraron que las áreas estimuladas por la sal y lo picante se sobreponían, y lo picante incrementaba la actividad cerebral en áreas activadas por la sal. Esto, indican, hace que el cerebro crea que se está comiendo comida salada cuando en realidad no lo está haciendo.
Según se indica en la investigación, si una persona puede tolerar los alimentos picantes, consumir más de este tipo de alimentos puede ser beneficioso para su salud.
El estudio fue publicado publicado en la revista Hypertension,