"Los estrategas militares estadounidenses tomaron las precauciones necesarias para minimizar los riesgos del personal ruso o sirio ubicado en la base aérea", dijo el capitán Jeff Davis, desde el Pentágono, sobre el ataque de Estados Unidos a la base aérea siria, ocurrido esta noche, donde también habrían militares rusos.
A pesar que no se ha confirmado si hay víctimas fatales tras el bombardeo, el analista internacional y académico de la Universidad Adolfo Ibáñez, Guillermo Holzmann, conversó con La Tercera sobre los posibles escenarios que el bombardeo podría provocar entre Rusia y Estados Unidos, si es que hubieran bajas militares rusas.
"En primer lugar se instala la desconfianza absoluta entre Rusia y Estados Unidos y hace inviable por un buen tiempo cualquier solución pacífica a la crisis de Siria, a la guerra civil y a la lucha contra el terrorismo en ese país. Lo segundo es que Rusia va a reclamar ante los organismos internacionales. Difícilmente va a dar una respuesta militar, pero sí va a generar una posición muy dura para defender a Al Assad, sobretodo porque tienen una base militar en Siria", señaló.
Al momento en que ocurrían los bombardeos, el Presidente Donald Trump cenaba con el presidente chino Xi Jinping, lo cual también marca un punto importante tras el ataque, según el académico. "China muchas veces ha estado mucho más cercana respecto a la situación de Siria a las posiciones de Rusia en las votaciones del Consejo de Seguridad. En consecuencia, lo que diga o haga el presidente chino en Estados Unidos es importante. Si abandona EE.UU inmediatamente es una señal de protesta", indicó el analista.
Relación EEUU-Rusia
A pesar de la posible vinculación de Rusia en la campaña del actual Presidente norteamericano, "desde Moscú todavía no logran establecer qué tipo de relación va a tener con Donald Trump. Lo que evidencia este ataque es un argumento interesante para Rusia respecto a cómo quieran aprovechar esta instancia para tener una mejor posición de atribución frente a Estados Unidos".