Regalos, palabras cordiales y abrazos marcaron el desembarco de Evelyn Matthei (UDI) en la Municipalidad de Providencia, el martes 6, la que había sido administrada durante cuatro años por la independiente -apoyada por la Nueva Mayoría- Josefa Errázuriz. A tanto llegó el buen ambiente, que sólo dos días después de que Errázuriz perdió la elección, ella y su círculo cercano se reunieron con Matthei y su equipo para comenzar a hacer entrega de la información que daba cuenta de la actual condición financiera y administrativa del municipio.

Según miembros de ambos equipos, fueron varias las reuniones sostenidas. Por el lado de Errázuriz, el que coordinó estas citas fue Marcelo Belmar (ex director de la Secretaría Comunal de Planificación), y en el círculo de Matthei, fue el ex alcalde de Recoleta Gonzalo Cornejo. Las jornadas de trabajo culminaron con una cena de camaradería -sin las alcaldesas- en el restaurante La Hacienda, ubicado en Francisco Bilbao con Pedro de Valdivia.

En la propia ceremonia de cambio de mando, la ex senadora le agradeció el traspaso de funciones a Errázuriz, porque fue "hecho con generosidad y pensando en la comunidad, antes que en los propios sentimientos, y se lo agradezco porque usted lo ha liderado".

Pero apenas dos días después de asumir, el ambiente de cordialidad cambió abruptamente. El jueves 8, en horas de la noche, llegó hasta las manos de Matthei el resultado del levantamiento de datos que había hecho su propio equipo al momento de tomar posesión de sus cargos y que daba cuenta de una serie de falencias en la administración anterior.

Reportajes tuvo acceso al informe elaborado por el equipo de Matthei y una auditora -contratada especialmente para ese fin- a partir de la información entregada por la administración de Errázuriz.

Según el documento, uno de los puntos más graves es un déficit de más de $ 3 mil millones de pesos en la Corporación de Desarrollo Social (CDS), organismo encargado de administrar los servicios de salud y educación en la comuna.

El déficit

La noticia de que había un déficit en el presupuesto de la CDS fue conocida tempranamente por la nueva alcaldesa y su círculo más cercano. El problema, según cuentan, es que esa cifra fue aumentando a medida que pasaron los días.

En una de las reuniones para el traspaso de información, Errázuriz habría reconocido que el déficit en la CDS era de aproximadamente $ 800 millones. Según relatan miembros del equipo de Matthei, en una segunda reunión la ex edil habría hecho entrega de un nuevo informe que daba cuenta de otra cifra: $ 1.380 millones. Sin embargo, de acuerdo a cálculos realizados esta semana por la administración de Matthei, hoy esa cifra asciende a $ 3.200 millones.

"Estos son dineros que no se ejecutaron y que no están en cuenta corriente. O sea, se usaron como bicicleta. Aquí se recibieron platas que tenían destinos específicos para educación y salud, y entraron a una bolsa común, no se entregaron para los fondos específicos y tampoco están en caja", señala Matthei. La actual edil incluso llega más lejos: "Se usaban para cualquier cosa, no sabemos en qué. Se pueden haber usado hasta para pagar sueldos (...). Aquí puede haber delito de malversación de fondos".

El desglose de ese déficit, según el 'informe Matthei', se divide en deudas y en recursos "usados para otros fines". Respectivamente, son alrededor de $ 1.900 millones de platas morosas que hasta ahora no se han pagado a los proveedores y $ 1.300 en fondos de educación que no se usaron para ese propósito.

En este último punto, serían dineros que iban destinados a los programas PIE (Programa de Integración Escolar), SEP (Subvención Escolar Preferente), Faep (Fondo Apoyo Educación Pública) y Financiamiento Compartido para el Colegio José Victorino Lastarria.

En relación a las deudas, el informe detalla que el municipio de Providencia acumula deudas con diversos proveedores de servicios y que el 83% de ese monto son platas que no se han pagado en más de 90 días.

Además, se agrega en el informe que si no se comienzan a pagar las deudas, los proveedores del área de la salud podrían dejar, por ejemplo, sin medicamentos a los consultorios de la comuna.

"De la información se desprende que hubo escasa o nula gestión directiva sobre la CDS (...); tampoco se generó análisis de la información e instancias formales de gestión y control de la misma, lo que finalmente repercute en la situación financiera de la CDS y el déficit de fondos presentado, insuficiente para cubrir la deuda", se lee en el documento.

"Este déficit me impide realizar cualquier mejoramiento de atención en cualquier cosa. El primer año nos vamos a dedicar solamente a ver cómo saneamos esto, porque este es un monto muy alto", dice Matthei.

Y esas medidas de austeridad ya se vieron reflejadas el viernes 9, cuando se dio a conocer que cuatro de los seis funcionarios del departamento por la No Discriminación no seguirían en su cargo. Sin embargo, Matthei aseguró que no cerrará ese programa.

Por estos antecedentes, la alcaldesa anunció a Reportajes que contratará a una empresa para que pueda auditar todo lo relacionado con la CDS para establecer cómo se llegó a ese déficit. Asimismo, ya pidió una cita con el contralor, Jorge Bermúdez, para tratar estos puntos.

Pero el informe también muestra otras potenciales irregularidades detectadas por el equipo de la nueva alcaldesa y que tienen relación con la contratación de personal y "gasto desmedido".

Según el informe, la gestión de Errázuriz hizo crecer el gasto en personal de manera "exagerada y muchas veces injustificada". Además, hace hincapié en que no fueron pocos los funcionarios que fueron contratados con sueldos mayores a $ 1 millón 200 mil que sólo tenían 4° medio.

El documento también da cuenta de situaciones insólitas, como la ocurrida en mayo de 2013, cuando el municipio compró un bus por $ 135 millones que apenas realizó un recorrido por la comuna. Según se detalla, el vehículo fue sacado de circulación por las autoridades al incumplir la normativa de transporte. Desde esa fecha, el bus se encuentra parado en los corrales municipales.