El día 24 de agosto a las 18 horas habrían llegado hasta el inmueble de Paula Gamboa los funcionarios de Carabineros que hoy fueron formalizados por robo con intimidación, tras allanar la casa y huir con 5 millones de pesos en efectivo. 

A esa hora frente al inmueble de calle Poética en la comuna de Pudahuel, una camioneta y un radiopatrulla se estacionaron frente a la casa. De la camioneta bajo el cabo Jorge Garcés quien de civil y con una pistola amenazó a un menor de la casa que se encontraba en el antejardín, manifestándole que si no le daba el dinero y la droga se iría detenido. Garcés se identificó como carabinero.

Acto seguido ingresó al inmueble el capitán Eduardo Elgueta con su uniforme y solicitando el dinero. Desde el segundo piso bajó una mujer con un bebé de tan sólo semanas en sus brazos. Según consta en las declaraciones leídas en audiencia, el ahora ex capitán habría amenzado a la mujer manifestándole que si no le entregaba el dinero le quitaría al lactante para llevarlo a un hogar. Sin embargo, estos no eran los únicos menores de edad que había en el inmueble. También se encontraba en el segundo piso un niño de seis años que según contó el fiscal "se orinó de susto" al ver todo lo ocurrido. El niño también fue amenazado con arma de fuego.

Un tercer hombre, aún no individualizado, fue quien bajó desde el segundo piso con una mochila donde se encontraba el dinero. Todo esto mientras Garcés se encontraba en la cocina rompiendo con un martillo parte de la pared asegurando que podía encontrar droga.

SET FOTOGRÁFICO

Una vez hecha la denuncia y como parte de la investigación realizada, el fiscal Emiliano Arias, solicitó que los menores que estuvieron en la casa el día antes señalado pudiesen reconocer en un set de 36 fotografías a los carabineros que aquel día los habrían atacado. El fiscal explicó en audiencia que dicha decisión se debió a que ya estaban en antecedentes de que eran funcionarios uniformados quienes habían cometido el delito.

Ambos menores de 17 y seis años reconocieron a Elgueta y a Gárces los que fue clave a la hora de lograr la prisión preventiva de los ex uniformados, ya que según expuso Arias en la audiencia, "son relatos elocuentes puesto que en el set todos están de verde con cortes de pelo similar y a pesar de ello fueron reconocidos".

Los otros dos funcionarios, Michael Atenas y Cristopher Ortiz no bajaron del automóvil pero según consta en los informes policiales ellos también estaban en ese lugar a bordo de los automóviles prestando cobertura y a criterio de la jueza María Francisca Zapata, los antecedentes son suficientes para determinar la autoría de estos dos ex funcionarios. Arias aseguró que se trabajó con las policías para acreditar que las otras dos personas se encontraban al interior de los vehículos ocurridos los hechos.