Una lumbalgia fue lo que dejó fuera al francés Franck Ribéry de la Copa del Mundo Brasil 2014. "Me duele en el alma verme obligado a dejar al equipo de Francia y renunciar al Mundial", manifestó muy dolido el jugador de Bayern Munich.

Pero no es el único caso de una estrella que se queda fuera del Mundial. El colombiano Radamel Falcao no pudo recuperarse de una rotura de ligamento cruzado de la rodilla izquierda, producida a comienzos de año mientras jugaba en Mónaco. "Sólo puedo sonreír por haberlo intentado hasta el final", dijo el cafetero.

Eso sí, no es el único colombiano que llora no jugar el Mundial, pues al "Tigre" se suma el defensa Luis Amaranto Perea.

La semana pasada, el italiano Riccardo Montolivo se fracturó una tibia en el amistoso ante Irlanda, disputado en la cancha del Fullham inglés.

Por otra parte, el alemán Marco Reus también se sumó a la lista de marginados de último momento, luego de sufrir la rotura parcial de uno de los ligamentos en su tobillo izquierdo contra Armenia, situación que lo dejará entre seis y siete semanas fuera de las canchas.

Otro que se quedó fuera Roman Shirokov, la mayor figura de Rusia. De hecho, el mediocampista ruso será operado este lunes, lo que impide su presencia en el certamen planetario.

Mucho antes, quedaron fuera los españoles Víctor Valdés y Thiago Alcántara, el británico Theo Walcott, y el holandés Rafael van der Vaart.

¿Y Chile? La "Roja" también aportó con un ilustre ausente: el mediocampista Matías Fernández.

La lista podría crecer: el colombiano Aldo Leao Martínez es duda por una molestia producida en un entrenamiento.

Además, hay otros jugadores que sufrieron dolencias y cuyo mejor desempeño en el Mundial está en duda. Es el caso de Arturo Vidal y de Luis Suárez, quienes fueron operados casi en el límite. Ambos son las esperanzas de Chile y Uruguay, respectivamente.