Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia tomaron distancia del asesinato de Luis Francisco Cuéllar, gobernador del departamento de Caquetá, adjudicado a la guerrilla colombiana, al cuestionar la versión del gobierno sobre el crimen.
La guerrila, al mismo tiempo, acusó a Cuéllar de financiar a los grupos paramilitares y en consecuencia dijo que "no era un simple civil" sino que "participaba en el conflicto armado".
"Sea quien sea, el autor del hecho, el gobernador no era un santo. Participaba activamente en la guerra", señalaron las Farc, en un comunicado difundido por la Agencia de Noticias Nueva Colombia (Anncol).
"No creemos que en cuestión de horas, el Presidente (Alvaro Uribe) y su régimen hayan establecido que las Farc es la autora del hecho, sin mostrar ni siquiera una sola prueba", señaló la nota.
A través del sitio de internet de Anncol, la organización afirmó que "nos negamos a creer en la 'verdad' construida a partir del discurso oficial de un régimen mafioso y paramilitar que ha hecho del crimen y de la guerra sucia una política de Estado".
Anncol afirmó que "el 90 por ciento del país ignora que el gobernador asesinado tenía amplios lazos paramilitares".
El comunicado difundido hoy recuerda que Cuéllar "fue investigado por la justicia en marzo pasado por sus supuestos vínculos con paramilitares".
Para el sitio, el gobernador asesinado "no era un santo, y participó activamente en la guerra y en la financiación los grupos paramilitares".