Un emisario del equipo internacional del Partido Socialista chileno, con fuertes vínculos con el círculo íntimo de la Presidenta de Argentina, Cristina Fernández, viajó el lunes pasado a Buenos Aires, para asistir a los actos de celebración de los 30 años ininterrumpidos de democracia transandina.
En medio de las actividades oficiales, el enviado especial del PS aprovechó de reunirse con funcionarios de la Casa Rosada y miembros del entorno kirchnerista, para transmitirle un mensaje a la mandataria transandina.
La ofensiva busca revertir la decisión de reemplazar al embajador de Argentina en Santiago, Ginés González, quien ha generado buenos vínculos con diferentes sectores políticos chilenos.
El objetivo de fondo, sin embargo, era hacer ver a la Presidenta Fernández la incomodidad del socialismo por el nombramiento de Juan Manuel Abal Medina en el cargo.
Abal Medina se desempeñó hasta hace algunas semanas como jefe de gabinete y asesor de la Presidenta Fernández. Su salida fue parte del golpe de timón que dio la gobernante para salir al paso de los malos resultados obtenidos por el kirchnerismo en las elecciones legislativas del 27 de octubre pasado, según especuló la prensa transandina.
Aunque aún no se ha confirmado su nombramiento, -de hecho, ha sido vinculado a otros cargos en el aparato estatal argentino-, la posibilidad de que arribe a Santiago preocupa al equipo internacional del PS: si bien se valora su cercanía con Cristina K, en el socialismo no olvidan que Abal Medina ha sido el nexo clave para que Marco Enríquez-Ominami consiguiera fortalecer sus nexos con el kirchnerismo.
Así, en marzo de 2012, el ex candidato presidencial fue recibido por la mandataria en su despacho en la Casa Rosada, replicando el gesto que la presidenta ya había hecho, en 2009, en plena campaña presidencial chilena.
El apoyo explícito de la familia Kirchner a la primera candidatura del ex diputado socialista fue lo que terminó por lesionar las relaciones del oficialismo transandino con la Concertación y en especial, con el PS chileno.
Lazos que comenzaron a ser reconstruidos recién a mediados de 2010, en encuentros académicos, a los que asistieron figuras socialistas como Jaime Gazmuri y Luis Maira.
Otra cita que reunió a dirigentes chilenos y argentinos fueron las "Conversaciones en Buenos Aires", realizadas en 2011 y después de las que se concitaron reuniones periódicas de dirigentes chilenos con altos funcionarios del gobierno de Cristina Fernández.
Vínculos que han sido, en particular, con Rafael Follonier, principal operador de la Casa Rosada en temas internacionales, y Oscar González, secretario de relaciones parlamentarias del jefe de gabinete, que por esos tiempos seguía siendo Abal Medina. Ambos visitaron el país en septiembre pasado, para los actos conmemorativos de los 40 años del Golpe Militar.
Con todo, apenas trascendió en Argentina que el ex jefe de gabinete podría arribar a Chile, desde la Casa Rosada enviaron sendos mensajes hasta el PS.
Pese a ello, según fuentes partidarias, el socialismo se inclina más bien por empujar la continuidad del actual embajador, Ginés González, quien tiene referencias claras en la Nueva Mayoría, en particular, en el "bacheletismo".
Consultado sobre el tema, el integrante del equipo internacional del PS, Ricardo Núñez, señaló que si bien no conoce a Abal Medina, "preferiría que se designara a una persona con relaciones reales con el socialismo chileno", señaló.