La recordada "Pelea del Siglo", que enfrentó en Kinshasa -capital del entonces Zaire, hoy República Democrática del Congo- a Muhammad Ali y George Foreman, y de la que se cumplen 40 años, se disputó también fuera del cuadrilátero, con cruce de declaraciones entre ambos púgiles.
El mítico Muhammad Ali derrotó por nocaut en el octavo asalto a Foreman, otra de las leyendas del boxeo, y recuperó el título de campeón mundial de los pesos pesados, del cual había sido despojado como consecuencia de su negativa de formar parte del ejército estadounidense en la guerra de Vietnam, en su condición de creyente islámico y su consecuente objeción de consciencia.
Algunas frases de Ali durante la preparación de la pelea entraron definitivamente a la historia. Entre las más recordadas resaltan:
-"Vuela como una mariposa, pica como una abeja; sus manos no pueden golpear lo que sus ojos no pueden ver".
-"Estoy tan rápido, que anoche apagué la luz de la habitación de mi hotel y me metí en la cama antes de que la pieza estuviese a oscuras".
-"He hecho algo nuevo para esta pelea. Luché contra un cocodrilo. Peleé contra una ballena. Atrapé relámpagos. Envié rayos a prisión. Solo en la última semana, asesiné a una roca, herí a una piedra, hospitalicé a un ladrillo. Soy tan malo que hago enfermar a la medicina".
Tras el combate, Foreman desvirtuó su derrota. Sin embargo, años más tarde, tendría la hidalguía de reconocer su error y enmendar la historia con frases como:
-"Muhammad me sorprendió, lo admito. Me derrotó. Esa noche, él fue simplemente mejor en el ring".
-"Después de perder con Ali en Zaire, dije a todo el mundo que había sido un robo. Que las cuerdas del ring estaban sueltas, que había droga en el agua... Entonces, una vez cambié mi vida (ahora es pastor evangélico), me di cuenta de que había puesto una mancha en la carrera de ese gran hombre (Ali). ¿Por qué debería salir y escupir sobre su victoria para manchar el nombre de este gran hombre?", confesó en una entrevista a la revista Esquire, en 2006.
Con todo, el "Rugido en la Selva" trascendió mucho más allá del simple combate y se convirtió, en distintos ámbitos en un hito en la historia del deporte.