La simulación del traslado del Papa desde la Nunciatura Apostólica, en Providencia, fue el escenario elegido ayer por Carabineros para realizar un ejercicio práctico, que incluyó vehículos policiales seguidos de cerca por el Centro Nacional de Gestión de Despliegue Operativo y Servicios. Esta unidad será la encargada de vigilar los pasos del Pontífice en cada una de sus actividades.

Para cumplir esta misión, Carabineros cuenta con cerca de 100 cámaras de la Unidad Operativa de Control de Tránsito (UOCT), además de los dispositivos instalados en los vehículos policiales, helicópteros y de sus efectivos en terreno, todos los cuales transmitirán en tiempo real. Para los eventos masivos, la policía contará con tres drones (uno en cada evento).

"Todas estas imágenes que vamos recibiendo van siendo analizadas desde este centro para poder cooperar o dar indicaciones al personal que estará en servicio en las distintas ciudades", explicó el general director de Carabineros, Bruno Villalobos.

Siete efectivos estarán a cargo de la revisión de las cámaras. "Acá vemos cómo se va desplazando el Papa hacia sus actividades y, a la vez, ir coordinando con todas las unidades policiales el tema de la contención y la seguridad", dijo Víctor Calquín, geógrafo de la Unidad de Análisis Criminal de la institución.

Agregó que pueden monitorear "las cámaras de Control de Tránsito, de las redes de Transantiago y de Carabineros". Respecto del despliegue de los 18 mil efectivos encargados de la seguridad, 4.292 estarán en Temuco; en Iquique habrá 3.616 carabineros, mientras que para Santiago se dispuso de 10.108 funcionarios.

Además de rondas preventivas en Temuco y Santiago, en Iquique también se desplegaron los servicios policiales, donde el Gope revisó los más de 40 km del recorrido del Pontífice. De igual forma se hicieron patrullajes aéreos en la ciudad.

"Ataques menores"

En subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, quien participó de la actividad de Carabineros, se refirió a los ataques a cinco iglesias ocurridos el viernes. "Los ataques fueron bastante menores. Eran básicamente incendiarios y uno de ellos que técnicamente era una bomba de ruido. Estos son grupos bien dispersos que operan desconcentradamente y nosotros estamos usando todas las herramientas legales que nos permitan identificarlos".

Al final de la cita, Aleuy y Villalobos se reunieron en privado para analizar los últimos detalles del servicio de seguridad del Papa, que estará operativo a partir de mañana.