Lionel Messi dijo hace algunos días que 2012 no fue su mejor año deportivo. Pero sigue rompiendo récords con lo que realizó, como convertirse este lunes en el primer jugador en ganar cuatro veces el Balón de Oro, y de forma consecutiva.
La estrella del Barcelona estaba igualada junto a tres históricas figuras del fútbol, con tres premios cada uno: los holandeses Johan Cruyff y Marco van Basten y el francés Michel Platini.
Y aunque la disputa de Messi es por ser el mejor de la historia, carrera en la que se enfrenta a Pelé y Diego Maradona, les presentamos una pequeña comparación en imágenes que recuerdan las notables campañas de Cruyff, Van Basten y Platini, las estrellas superadas por la "Pulga".
JOHAN CRUYFF, BALON DE ORO en 1971, 1973 y 1974
Jugó diez años por el Ajax y en 1973 pasó al Barcelona, donde se quedó hasta 1978. Después actuó en la Liga Estadounidense, el Levante (que jugada en la Segunda División española) y regresó a Holanda en 1981, para defender otra vez al Ajax y retirarse en el Feyenoord.
Entre sus títulos destacan tres Copa de Europa, una Supercopa y una Intercontinental, además de ser pilar de la "Naranja Mecánica" en el subcampeonato Mundial de 1974.
Es considerado por la FIFA uno de los cuatro mejores jugadores de fútbol del siglo XX, junto a Pelé, Diego Armando Maradona, y Alfredo Di Stéfano, y el mejor de Europa.
MICHEL PLATINI, BALON DE ORO en 1983, 1984 y 1985
El ahora presidente de la UEFA es considerado por la FIFA como uno de los mejores jugadores europeos del Siglo XX y uno de los grandes volantes de la historia. En su país jugó por el Nancy y el Saint-Etienne, pero saltó a la gloria en la Juventus de Italia, donde en 1984 ganó la Recopa y la Supercopa de Europa y, en 1985, la Liga de Campeones y la Intercontinental.
Además, con la selección francesa, logró la Eurocopa de 1984.
MARCO VAN BASTEN, BALON DE ORO en 1988, 1989 Y 1992
Es considerado uno de los grandes delanteros de la historia, que debió terminar anticipadamente su carrera debido a una grave lesión que lo llevó al retiro 1995, aunque jugó su último partido en 1993.
Pero antes, logró con el Ajax tres ligas de Holanda, tres copas y la Recopa de Europa. Después pasó al Milan donde festejó dos Liga de Campeones, dos Supercopa de Europa y dos Intercontinental, además de torneos italianos.
Fue una de los símbolos de una generación dorada del fútbol holandés, que volvió a poner a ese país en la primera línea, especialmente en 1988, cuando ganaron la Eurocopa.
