En Beijing, con sólo 19 años, Natalia Duco ni siquiera pudo hacer válidos sus pergaminos en la bala. La chilena viajó de vuelta al país sin el protagonismo sudamericano y sólo registró un 22º puesto en su estreno olímpico. Ese paso por China demostró los problemas con los que ha lidiado.

Uno de ellos fue la salida del Plan ADO, por incompatibilidad de contratos con su auspiciador. Otro tropiezo fue cuando no pudo viajar al Mundial de Doha, en 2010, por problemas económicos y sólo tuvo que contentarse con los Juegos Sudamericanos de Medellín, donde tampoco lo pasó bien.

"Ha sido un año muy difícil, en que he estado sin apoyo. Siendo una medalla de oro segura, no me dieron ni 100 pesos para mi preparación", explicaba en aquella ocasión.

Y en la antesala de Londres 2012, los Juegos que la catapultaron a la elite, Duco volvió a sumar inconvenientes. La balista denunció que "a mí me dan plata y lo agradezco, pero no me alcanza para cubrir lo básico, como deportista profesional. No puede ser que este año olímpico haya sido el peor pagado". El reclamo se fundó en que no pudo completar su estada (en enero) en Cuba, país de su entrenadora, Dulce Margarita García.

La sanfelipeña canceló todos los gastos de su bolsillo y luego le reembolsaron sólo dos tercios de los viáticos. Además, se minimizó el dinero anual para su técnico.

Encima, los atletas nacionales (que fueron ocho) reclamaron por la indumentaria e, incluso, por problemas en las tallas de petos.

Al respecto, el subsecretario de Deportes, Gabriel Ruiz Tagle, aclaró hace unos días: "No hemos recibido queja. Invertimos US$ 40 millones en alto rendimiento desde que asumimos".

Sobre el conflicto por el viaje a Cuba, el ex timonel de Colo Colo manifestaba que "nosotros financiamos 60 de los 90 días que ella estuvo allá, porque eso fue lo que se aprobó. Los fondos se entregan de acuerdo con un mérito técnico. No hay ningún deportista que no haya sido apoyado".

Y ahora, desde Londres, apunta a que "Natalia está dentro de las cinco que más apoyo económico recibe" y que "los proyectos los aprueban la federación y el plan, no el IND".

Apoyo a un récord

Pese a las trabas, Duco tuvo una gran actuación. A primera hora, se metió en la final, gracias a un lanzamiento de 18 metros y 45 centímetros. La marca superó ampliamente aquella con la que clasificó a los Juegos (17,73) y le permitió ser duodécima entre quienes pelearían por subir al podio.

Ya en la instancia decisiva, se sintió mejor y terminó rompiendo la marca nacional con los 18,80 metros. Al respecto, la sanfelipeña no escondió sus deseos de obtener una presea en Río de Janeiro 2016: "Estoy feliz, porque hice mi mejor marca, récord de mi país. Quedé décima, luego de entrar 12 y disfruté la competencia. Me sentí bien. Cumplí mi objetivo, aunque me siento capaz de algo más grande. Puedo llegar a ser mejor, así es que para eso trabajaré". Antes de la final había dicho que "lo logré y nadie me tenía en cuenta".

El inesperado logro de la deportista despertó admiración en las autoridades que acompañan a la delegación. Ruiz Tagle alabó la buena jornada nacional (por el cuarto puesto del gimnasta Tomás González).

"La llamé, la felicité y le dije que les había tapado la boca a varios. Quedamos de juntarnos en Santiago para planificar su futuro. Ella puede dar más y si es necesario incrementaremos los recursos. Es prioridad. A ella le pareció positivo y seremos consistentes en ello", anunció el subsecretario de Deportes.