Los drones de vigilancia con parlantes, que desde hace un mes operan en la comuna de Las Condes, podrían expandir su cobertura a condominios privados. Así lo explicó el alcalde Joaquín Lavín (UDI), quien aseguró que el uso de los instrumentos de televigilancia ha sido bien evaluado por los vecinos.
"En espacios públicos los drones han dado buenos resultados, es por eso que estamos conversando con administradores de dos condominios que tienen grandes problemas de microtráfico al interior de sus espacios comunes, para expandir la vigilancia al interior de ellos", explicó el alcalde.
"Hasta ahora los resultados han sido positivos y los drones son muy valorados por los vecinos, quienes, de hecho, llaman a Seguridad Ciudadana para que vaya el dron cuando ven alguna situación en las plazas", agregó el edil.
Pero no todos están conformes con la operación de los drones de vigilancia. Ayer, las organizaciones Derechos Digitales y la Fundación Datos Protegidos presentaron un recurso de protección para que se suspenda su uso.
"Consideramos que estos drones atentan contra garantías fundamentales, principalmente relacionadas a la privacidad", señaló María Paz Canales, directora ejecutiva de la organización Derechos Digitales. "Con este programa, el alcalde Lavín está realizando un estado de vigilancia permanente que no se condice con una sociedad democrática", añadió.
Desde la organización también criticaron que el uso de drones en la comuna estaría incumpliendo la norma DAN-151, de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), que regula las operaciones de aeronaves pilotadas a distancia en zonas habitadas.
"Los drones implementados en Las Condes tienen un peso que supera la normativa. Tampoco está claro que cumplan con el requisito de que sus controladores estén permanentemente en control visual del dispositivo, lo que acarrea un peligro inminente para las personas, ya que podrían caer y dañarlas a ellas o a su propiedad", dijo Canales.
Según la norma técnica, el peso máximo para los drones es de nueve kilos. Según señaló Canales, los drones adquiridos por la municipalidad pesan 9,5 kilogramos y la cámara sobre ellos medio kilo adicional, con lo cual el peso total sería de alrededor de 10 kilos.
Al respecto, el alcalde Lavín opinó que "es lamentable que organizaciones como las que presentaron hoy el recurso no se preocupen de lo más importante para los habitantes, que es la seguridad. Estas son innovaciones tecnológicas que están permitiendo lograr resultados exitosos". Además, especificó que los drones "cumplen perfectamente con la normativa de la DGAC".
El edil aseguró que antes de implementar la vigilancia al interior de los condominios, se tendría que hacer una consulta con los vecinos, para sondear que todos estén de acuerdo con la medida.