La campaña de cara a la segunda vuelta del próximo 7 de mayo comenzó ayer de la peor forma posible para el favorito a la Presidencia de Francia, el centrista Emmanuel Macron. El candidato centrista de "En Marcha" fue acogido entre abucheos y gritos a favor de su rival de extrema derecha, Marine Le Pen, durante una visita a trabajadores en huelga de una planta de la compañía estadounidense Whirlpool en Amiens, su ciudad natal.
Por sorpresa y demostrando la cintura política que siempre se le ha atribuido, Le Pen apareció en la fábrica junto a los trabajadores, mientras Macron se reunía a puertas cerradas con dirigentes sindicales en la Cámara de Comercio.
La astuta maniobra de la candidata del Frente Nacional, que el canal de noticias BFM transmitió en vivo, tuvo como consecuencia inmediata restarle atención a Macron, según The Associated Press. Mientras Le Pen se tomaba selfies en medio de los trabajadores con chalecos protectores amarillos -muchos de los cuales coreaban "Marine Presidenta"- y se declaraba la abanderada de la clase trabajadora francesa, el ex ministro apareció de traje y corbata en la reunión con los dirigentes sindicales.
"Que Macron venga aquí, no para reunirse con los huelguistas sino a no sé qué sala de la Cámara de Comercio para reunirse con dos o tres personas es un demostración tal de desprecio que he decidido salir de mi consejo estratégico (en París) para venir a Amiens", dijo Le Pen, quien en primera vuelta logró un 21%.
Macron (24%) defendió su encuentro con los sindicatos y atacó la "utilización política" que a su juicio hizo su adversaria del conflicto social. "El proyecto de Le Pen no arregla nada de la situación de Whirlpool. ¿La salida de la UE? Si ella es elegida, esta fabrica cerrará, como muchas otras en Francia", consideró. Más tarde, forzado por la acción de Le Pen, acudió a ver a los huelguistas, que lo recibieron entre abucheos y duras críticas.
La planta de Amiens prevé cesar la producción de secadoras en los próximos meses para ceder esa división a Polonia. Le Pen ha prometido mantener abierta la fábrica a toda costa si gana las elecciones. Le Pen, quien renunció a la presidencia del Frente Nacional para enfocarse en el balotaje, presentó ayer su nuevo eslogan, "Elegir Francia". Lo mismo hizo Macron, cuyo nuevo lema es "¡Juntos, Francia!".