La líder derechista del Frente Nacional francés, Marine Le Pen, reclamó hoy un referéndum sobre la inmigración similar al que tuvo lugar el pasado domingo en Suiza y que se instaure por ley la preferencia de los franceses en el acceso a los puestos laborales.
"Los pueblos tienen que tener derecho a controlar sus fronteras, a decidir quién puede entrar en su país. Deben poder controlar la entrada, abrir las puertas y decidir quién entra", aseguró Le Pen en una entrevista con la página digital del diario Les Echos.
Las declaraciones de Le Pen coinciden con la publicación de un sondeo que asegura que el 34 por ciento de los franceses apoya las ideas de su partido, una cifra nunca alcanzada por el FN.
Los encuestados coinciden menos con la propuesta de la formación derechista sobre la preferencia de los franceses en el acceso a los puestos laborales.
Le Pen señaló que es así porque esa idea se ha explicado mal y ha sido "caricaturizada" por sus rivales políticos.
"No se trata de una preferencia racial, se trata de que cuando hay un puesto de trabajo el empresario tenga que mostrar que no ha encontrado a ningún nacional para ocuparlo antes de contratar a un extranjero", indicó.
Otra de sus ideas que menos respaldo tiene es la de sacar a Francia del euro, algo que Le Pen explicó por "la sacralización" de la moneda única.
"No hay un debate sobre este tema, igual que pasó con la Constitución europea, que antes del debate apoyaba un 65 % de los franceses y en el referéndum fueron menos del 50 %", recordó.
La líder ultraderechista se mostró confiada en que presentarán listas en más de 500 municipios de más de 3.500 habitantes en las elecciones locales del mes próximo, lo que significará que "más de la mitad de los franceses podrán votar por listas del FN".
"Estoy convencida de que ganaremos algunas ciudades y que tendremos más de 1.000 concejales", señaló.