El Sevilla tenía la gran oportunidad de meterse entre los ocho mejores equipos de Europa. Frente al Leicester, en Inglaterra, defendía el triunfo 2-1 obtenido en España, para tratar de superar por primera vez los octavos de final del torneo bajo esta denominación (en la Copa de Europa 1957-58 accedieron a cuartos). Pero sucumbieron. Los Zorros ganaron 2-0 y siguen con vida, también haciendo historia.

Sampaoli vivió el partido intensamente, como acostumbra. Hoy pudo estar a ras de cancha, considerando que en el juego de ida estaba suspendido y vio el cotejo desde un palco. Quizás, esa intensidad del casildense la provocó el pobre primer tiempo de sus dirigidos, que recién reaccionaron con el marcador en contra. A los españoles les costó entrar en sintonía, teniendo en consideración la importancia del partido. El Leicester, con todas sus limitaciones, fue más y se retiró en ventaja para el descanso. Luchó, apretó y corrió más que el Sevilla, pese a que no muestra una construcción de juego tan agradable a la vista. A la larga, así ganaron la Premier.

El arco de Sergio Rico no corría peligro, pese al empuje del local. Pero el quiebre llegó en los 27', con el tanto de Wes Morgan. El capitán conecta un tiro libre de Mahrez superando la marca de Mercado. Ese gol le daba la clasificación a los Zorros. Además, fue el primer tanto que recibió el Sevilla de visita en la presente Champions.

La desventaja levantó al Sevilla, que atacó más y le quitó el balón al local, básicamente por la necesidad de anotar.

Para la segunda parte, Sampaoli introdujo dos cambios: Mariano y Jovetic por Mercado y Sarabia. "Vamos, vamos" arengaba el DT cuando se reinició el cotejo. Pero esos gritos no alcanzaban. Un remate de Escudero que se estrelló en el travesaño (53') inquietó en la portería de Kasper Schmeichel. Un minuto más tarde, Marc Albrighton anotó el 2-0 con un zurdazo bajo. Todo mal para el Sevilla. Sin ideas, con el marcador en contra y el reloj corriendo. Aun así, estaban a un gol del alargue. El Leicester, con un libreto claro y cómodo para su forma, se sentía en su salsa (llegando a defender con ocho jugadores dentro del área), rememorando el equipo de Ranieri que deslumbró al mundo. Hoy, con Craig Shakespeare en la banca, algo de ese espíritu se vio. La clasificación se alejó más con la torpe expulsión de Samir Nasri (74'), por doble amonestación. Bajísimo partido del francés.

Una ventana se abrió para el Sevilla con el penal sancionado por falta de Schmeichel a Vitolo. Pero el remate de N'Zonzi fue muy anunciado y falló. En rigor, el golero danés lo contuvo de gran manera. Nada le resultó a los andaluces. En los 83', Sampaoli es expulsado por el juez italiano Daniele Orsato. Fue el quinto partido del Sevilla en territorio inglés y nunca ha podido ganar, cosechando tres derrotas y dos empates.

Fin al sueño europeo de Sampaoli. A muy poco de un logro importantísimo, su equipo se cayó.