Era una de las posibles víctimas del monstruo. Autodenominado el más NN del Festival de Viña 2015, León Murillo se transformó en una nueva revelación del certamen.

Repasando desde la política hasta las AFP, pasando por los conflictos de pareja, el actor y guionista se ganó al público al instante.

Con casi una hora de show, Murillo consiguió ambas gaviotas, mostrándose visiblemente emocionado. "Este reconocimiento, para cualquier artista en este país, es el más importante", señaló mientras el monstruo gritaba "olé, olé olé olé, León, León".

Casi al concluir su show, no obstante, el comediante consultó a los asistentes: "¿saben cuál es la mirada del cocodrilo?, lo que causó las risas de muchos. "Yo se las voy a enseñar", señaló, advirtiendo que le podría traer problemas. Cuando intentó hacer el gesto para explicar su chiste, un rápido tiro de cámara llevó la imagen desde Murillo hasta el jurado, tanto en la transmisión televisiva como en la Quinta. Con ese chiste a medias, el humorista bajó del escenario.

Consultado por esa supuesta censura que comenzó a inundar las redes sociales, el artista explicó: "Están equivocados, censura no la he sentdo, si no, no hubiese venido. Se me aprobó la rutina, debió ser un problema técnico", comenzó a analizar, sorprendido por la pregunta durante la conferencia de prensa.

Luego, explicó el incidente: "Producto de todo este nervio hay harto de improvisación. Técnicamente no iba terminar como terminé. Técnicamente no estaban preparados en dirección, los desconcerté, no estaban preparados", señaló culpándose totalmente.

"Cuando me hablan de censura, yo no soy quién para poner condiciones", contó sobre su negociación con el certamen. "Aún no he hecho nada en este país. Agradezco que me dejen hacer lo que hago. Me voy con esta satisfacción de que el canal me dejó tirar las ideas que quería", agregó.

Sobre su crítica rutina humorística, manifestada a modo de stand up coomedy, Murillo manifestó poco interés en encasillarse en esa área del humor: "Los membretes los pone el resto de la gente. Yo vine a hacer humor y, de alguna forma, que lo haya hecho yo es circunstancial". A pesar de eso, sabe que su actuación en la Quinta "abre la puerta a un nuevo género sobre el esenario, pues la mayoría cree que (el stand up) es para bares o para pequeños públicos". 

Casi al finalizar la conferencia, el humorista reconoció: "Ha sido una de las cosas, sin pretender, más importantes que he tenido en mi vida. (...) No lo imaginé ni en mis mejores sueños. Todavía no logro dimensionar lo que está sucediendo".

Al salir de escena, el artista saludó a su equipo, especialmente al humorista Jorge Alís, revelación de Viña 2014 y quien formó parte de su equipo de libretistas.