"Hay un problema y lo estamos atacando entre todos, con una normativa que está funcionando desde hace un año". Con esas palabras, la Presidenta Michelle Bachelet analizó ayer el primer año desde la entrada en vigencia de la Ley de Etiquetado de Alimentos, que exigió la presencia de sellos de advertencia en aquellos productos altos en sodio, azúcares o grasas saturadas, y que, además, prohibió venderlos en colegios y dirigir su publicidad hacia los menores de 14 años.
El Ministerio de Salud (Minsal) informó que en este periodo se realizaron 3.008 inspecciones a nivel nacional, alcanzando un 71,9% de cumplimiento de la normativa. Se detectaron 845 situaciones con irregularidades (28,1%), las que dieron origen a sumarios atribuibles a problemas de etiquetado, publicidad dirigida a niños (en envases o lugares de expendio) y a venta de estos alimentos en establecimientos educacionales (ver infografía).
Del total de procedimientos iniciados, el 4,2% terminó con multas, es decir, 36 casos recibieron sanciones monetarias por montos que oscilaron entre 0,5 y 50 UTM ($ 2 millones 339 mil). No obstante, el 34% de los sumarios están en proceso, mientras que el 66% concluyeron. De este grupo, el 91% de las sentencias fueron apercibimiento de cumplir en un plazo estipulado junto a una amonestación.
El subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows, explicó que "inicialmente, la mitad de las fiscalizaciones terminaba en inicios de sumarios. En las últimas inspecciones, en cambio, prácticamente todos los establecimientos educaciones y los deltas de supermercados muestran que hay un completo cumplimiento. Este porcentaje irá subiendo en el futuro".
Burrows agregó que se han encontrado fallas "en la venta de productos que deberían tener sellos y no los tienen. Muchos son productos importados y no tienen los sellos pegados encima".
El presidente de la Comisión de Salud del Senado, Guido Girardi (PPD), opinó que aún falta por rotular aquellos productos provenientes de las cadenas de comida rápida. Sin embargo apuntó que "los hechos nos han dado la razón. Es más importante la salud que proteger intereses de las grandes empresas. Acá hay una trampa: la comida chatarra no es alimento, es basura".
Empresas
El director ejecutivo para Las Américas de Nestlé, Laurent Freixe, sostuvo que "la ley no incentiva a las empresas a mejorar sus productos, porque muchas veces un producto mejorado va a mantener el sello negro. No hay incentivo para mejorar o este no es lo suficientemente visible o claro".
Para el presidente de AB Chile, Rodrigo Alvarez, es importante evaluar "a conciencia y sin prejuicios" los resultados de la norma, considerando que en junio del próximo año se profundizan los límites de fabricación de estos productos. "La medición cada 100 gramos y las ambigüedades en materia publicitaria nos parece que son algunos de los aspectos que no están favoreciendo los resultados de la ley, que se originó con un espíritu que, como industria, compartíamos, pero que hemos visto que producto de malas decisiones técnicas se ha visto empañada", dijo.
José Tomás Lyon, líder de la marca en Chile de la empresa Mondelëz, fabricante de productos como Oreo, Milka y Queso Philadelphia, indicó que "tenemos un compromiso global con el tema de los ingredientes críticos, más allá de las regulaciones legales locales. Por eso, estamos trabajando en la reducción de esos ingredientes, pero también en raciones o porciones adecuadas, en la alimentación equilibrada y en el deporte continuo".