En momentos en que Francia y Reino Unido anunciaban inminentes intervenciones militares sobre Libia, el régimen de Muammar Gaddafi decidió un alto el fuego inmediato.

Así lo anunció el ministro de Asuntos Exteriores, Mussa Kussa, un día después de que la ONU diera luz verde a una zona de exclusión aérea que busca precisamente frenar las incursiones de Ejército gaddafista sobre los rebeldes.

Mussa Kussa dijo que su gobierno está haciendo todo lo posible para proteger a la población civil y entregar la ayuda humanitaria necesaria. Afirmó además que Libia está dispuesta al diálogo, aunque no entregó más detalles al respecto.

La autoridad invitó a los organismos internacionales y a entidades humanitarias a visitar el país para verificar lo que está  ocurriendo en el enfrentamiento armado con los rebeldes.

En todo caso el ministro libio criticó la resolución de la ONU. "También expresamos una gran tristeza hacia la imposición de la zona de exclusión aérea sobre Libia, inclusive la aviación civil", dijo Kusa.

En horas previas a este anuncio las tropas leales a Muammar Gaddafi, atacaron las posiciones de los insurgentes en la ciudad de Misrata.