"Piñera no es tan de derecha. No es un facho. (…) Me siento cómodo conversando con él, por más que esté en la vereda del frente". La confesión del ahora ex Presidente uruguayo, José Mujica, sorprende. Especialmente en una era donde los gobernantes sudamericanos aparecen marcados y divididos por sus posiciones políticas y por bloques económicos. Pero Mujica, sin importar estos límites, reconoce la amistad que forjó con el ex Presidente chileno, y el libro Una oveja negra al poder sostiene que esa relación es más cercana que la que tiene con Michelle Bachelet.
"Por supuesto que Mujica siente especial simpatía por la socialista Michelle Bachelet, actual Presidenta de Chile y antecesora de Piñera. Su relación con ella no es tan cercana como con Piñera por una única razón: falta de tiempo juntos como Presidentes", destaca el noveno capítulo, titulado "El testigo", del libro sobre Mujica recientemente publicado por los periodistas uruguayos Ernesto Tulbovitz y Andrés Danza.
Según el texto, que será editado en Chile por Random House, Mujica "siempre se sintió cerca del ex Presidente de Chile Sebastián Piñera, uno de los empresarios más ricos de ese país. Generaron una buena relación, basada en la sinceridad y la mutua conveniencia. A una semana de jurar como Presidente, Mujica viajó a Santiago a la asunción de Piñera. Ambos coincidieron durante cuatro años en cada una de las cumbres presidenciales y hasta llegaron a realizar un viaje conjunto de una semana a la Antártida".
De todas formas los autores destacan las frases con las que el uruguayo ensalza a Bachelet. Destacó su "vida de lucha" y sostuvo que "es un monumento a la mujer política".
Por el contrario, Mujica se animó ante Tulbovitz (ver entrevista) y Danza a describir a Piñera: "Es un capitalista, conservador, pero tiene claro que a la gente hay que darle asistencia. En Chile hay un 30% de derecha, derecha, derecha. En Uruguay, nunca entró tanto la dictadura como allá. Pero él no está dentro de ese 30%".
De la misma forma como puede mostrar su simpatía por Piñera y por Bachelet, en el libro José Mujica se muestra muy interesado por la Alianza del Pacífico, pese a que Uruguay es miembro del Mercosur y a las críticas que gobernantes de izquierda han lanzado contra el bloque. "Le dije a Dilma (Rousseff) que es una macana que ellos no vayan con nosotros a intentar ser miembros observadores de la Alianza del Pacífico. No me contestó nada, pero me escuchó. Con Ollanta Humala también hablé mucho de esto. Lo metió Alan García en la Alianza del Pacífico y él no se quiso echar para atrás. Brasil es el que tiene que buscar la costa del Pacífico. Le dije a Dilma que tenga una política especial con Perú. En la costa del Pacífico se va a jugar un partido muy importante", destaca.
Mujica apela al pragmatismo, más que a las diferencias ideológicas y reflexiona que "Churchill se alió con Rusia y con Stalin cuando lo tuvo que hacer. Mucho más allá de la izquierda y la derecha, los hombres al frente de los países tienen que ser pragmáticos. Hay que tener mucho sentido común, esa es la mejor ideología. Llegado el caso, hasta Churchill dijo 'vamos arriba con Stalin'. Y mirá que Churchill era muy anticomunista. Hay que leerlos a esos tipos para aprender de política".