"Mica", como llamaban afectuosamente en el PS a Michelle Bachelet en 1974, cuando era una joven militante de 22 años, era una de las pocas autorizadas para ingresar a la casa de seguridad de avenida Chile-España  donde se escondía la directiva del partido, en los primeros años del régimen militar.

Ella servía de correo y enlace de confianza con la cúpula socialista y además, ayudaba a reclutar voluntarios para el trabajo clandestino. Entre sus misiones estuvo la de oficiar de "sombra" del ex diputado Carlos Lorca Tobar, es decir, cuando éste salía disfrazado a la calle, Bachelet lo seguía desde una distancia prudente para asegurarse de que todo estuviera en orden.

Si había una situación de riesgo, Lorca debía abrir el diario que llevaba en la mano para dar la señal de alarma. Sin embargo, en una ocasión la actual Presidenta observó desconcertada cómo se detenía cada media cuadra y se ponía a leer. Ante esto, otro personero con quien debía sostener "un punto" de contacto, atravesó la calle y le dijo: "Pero ¿qué te pasa? Te vengo siguiendo hace 25 cuadras y no noto a nadie extraño detrás de ti".

Según ha comentado Bachelet: "Ese era Lorca, que se apasionaba por las cosas y que, por lo tanto, lo más importante era leer lo que estaba pasando en ese momento". Es una de las anécdotas que recoge el libro Lorca del periodista Juan Azócar Valdés y que relata la vida de ex dirigente socialista desde sus años como líder estudiantil, hasta su detención y desaparición en 1975, en manos de la Dina.

Anoche, Bachelet fue la invitada especial al lanzamiento del libro, en el Centro Cultural Palacio de La Moneda, donde también participó el timonel del PS, Camilo Escalona.

Era una ocasión especial para la Mandataria: Lorca fue su mentor político desde la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile y con quien dio sus primeros pasos en las juventudes del PS. De hecho, anoche Bachelet recordó una oportunidad en que ella se acercó a Lorca en el casino de la facultad y le manifestó su interés de ingresar a la JS. Pero -a diferencia de lo que ella pensaba, según contó- antes de aceptarla, Lorca le preguntó sus razones para militar y le dijo que primero debía realizar una serie de cursos.

MISION EN CAPUCHINOS
El libro revela otros episodios desconocidos de las labores partidarias de Bachelet tras el golpe de Estado. Entre ellos, su papel para difundir el histórico Documento de Marzo de 1974 en que la directiva de Lorca, Jaime López, Exequiel Ponce y Ricardo Lagos Salinas hace un duro diagnóstico de la actuación del PS durante la Unidad Popular.

El texto señala que las insuficiencias del partido fueron decisivas en el fracaso del gobierno de Allende y se critica la falta de "disciplina" y "monolitismo", deficiencias calificadas como "desviaciones pequeño burguesas".

El documento, que generó amplio debate interno en el partido, fue distribuido secretamente a los miembros de la colectividad. Según señala el libro, a Bachelet le correspondió llevárselo a Erick Schnake, quien estaba detenido en el Anexo Cárcel Capuchinos. El ex senador, después de leerlo lo cuestionó y dijo que "era una pretensión  de llevar al suicidio al socialismo chileno y fusionarlo con el PC".