En calle Dieciocho, en la Federación de Instituciones de Educación Particular (Fide), que agrupa a colegios subvencionados, representantes de esos planteles discutirán hoy, entre otras cosas, los alcances del ranking de notas.

Carlos Veas, secretario ejecutivo de la entidad adelanta que "si bien es cierto que el ranking es inclusivo, es una medida tomada a última hora, lo cual es cuestionable".

Agrega que "los alumnos que se van a ver afectados sabían desde primero medio cómo iba a ser el escenario, los colegios se ordenaron ante eso, los apoderados tomaron las medidas correspondientes", por lo que reprocha que se "cambien las reglas del juego, sin consultarle a nadie".

Por lo mismo, Veas sugiere que las nuevas ponderaciones se apliquen "al menos para la próxima generación de cuartos medios", para que haya tiempo de prepararlos.

Otro establecimiento que ha sido crítico con el ranking es el Liceo de Aplicación, el cual resolvió ayer presentar una acción judicial para frenar el alza de las ponderaciones, sumándose así al recurso de protección que mañana interpondrá el Instituto Nacional ante la Corte de Apelaciones. "Agradecemos al Consejo de Rectores que nos haya escuchado, pero no hubo ninguna respuesta a la necesidad de graduar su aplicación. Nosotros decimos que la herramienta ofrece oportunidades a más sectores, pero no se tomó en cuenta a los colegios históricos que no tienen notas de enseñanza media tan altas", indicó el director del Liceo, Antonio Pacheco.

El Liceo 7 de Niñas está analizando tomar acciones legales en contra de la herramienta. De ocurrir, el anuncio se daría mañana, al igual que el del Liceo Nacional de Maipú.

PRESENTACION

Francisco Javier Gil, creador del ranking de notas, asistió ayer al Instituto Nacional para explicar los alcances del ranking de notas. Al terminó de su exposición, los cerca de 200 institutanos que escuchaban, aplaudieron. Sin embargo, minutos más tardes, casi todos los presentes levantaron la mano y dijeron sentirse perjudicados por el ranking.

El rector del liceo, Fernando Pérez, sostuvo que "por muy bien intencionada que sea la medida, por muy fundamentada teóricamente, nuestros alumnos desde segundo hasta cuarto medio han sentido que no los beneficia".

Por lo mismo, aseguró que continúa con el recurso legal, el cual consiste en una orden de no innovar, la cual, obligaría a utilizar las ponderaciones que se utilizaron este año.

En tanto, la ministra de Educación, Carolina Schmidt, sostuvo que el ranking es una "medida que apunta en la dirección correcta (...) para asegurar una mayor equidad en la selección de los alumnos". Sin embargo, manifestó su preocupación "por la fórmula elegida por el Consejo (...) pues no es un ranking puro, sino que se basa en una bonificación y perjudica a aquellos establecimientos que tienen notas más bajas".

Según estadísticas dadas a conocer por Schmidt, en un colegio particular pagado el promedio de notas es de 5,9, mientras que en uno municipal la media es de 5,4.