Corea del Norte dijo el sábado que quiere llegar a un "equilibrio" de fuerza militar con Estados Unidos, que más temprano mostró señales de que su paciencia por la opción diplomática se estaría agotando luego de que Pyongyang lanzó un misil sobre Japón por segunda vez en un mes.

Corea del Norte lanzó en las primeras horas del viernes un misil que pasó sobre Japón y cayó en el Océano Pacífico, según informaron autoridades surcoreanas y japonesas, profundizando la tensión después de la reciente prueba norcoreana de su sexta y más poderosa bomba nuclear.

"Nuestro objetivo final es establecer el equilibrio de una fuerza real con Estados Unidos y hacer que los gobernantes estadounidenses no se atrevan a hablar de una opción militar", afirmó el líder norcoreano, Kim Jong Un, según declaraciones recogidas por la agencia de prensa estatal norcoreana KCNA.

Imágenes difundidas por KCNA mostraron a Kim, rodeado por funcionarios, observando el vuelo de un cohete desde un lanzamisiles móvil. Corea del Norte ha lanzado decenas de misiles bajo su gobierno.

"La eficiencia y confiabilidad del Hwasong-12 para el combate se verificaron exhaustivamente", dijo Kim, según la nota de KCNA. El líder agregó que el objetivo de su país de completar su fuerza nuclear estaba "casi en su fase final".

Tras el lanzamiento del viernes, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, H.R. McMaster, dijo que a Estados Unidos se le estaba acabando la paciencia sobre los programas de misiles y nuclear de Corea del Norte.

"Hemos estado postergando el problema", dijo McMaster a medios. "Para aquellos (...) que han estado comentado la falta de una opción militar, hay una opción militar".

El misil que lanzó el viernes Pyongyang sobre Japón sobrevoló Hokkaido, en el norte, y se adentró en el Océano Pacífico a unos 2.000 kilómetros al este. El cohete alcanzó una altura de unos 770 kilómetros y voló durante unos 19 minutos, cubriendo una distancia de 3.700 kilómetros.