El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, ha dirigido ejercicios de defensa con fuego real en la costa este del país, según informó la agencia KCNA, en lo que supone una nueva visita a las tropas tras varias semanas de tensión en la región.

Kim emitió el lunes "sin previo aviso" la orden de iniciar los ejercicios y "examinó la capacidad de aterrizaje y anti-desembarco" de dos unidades de tierra y mar respectivamente del Ejército Popular norcoreano, indicó KCNA.

"Tuvo lugar el ejercicio (simulado) consistente en golpear y aniquilar enemigos" en el agua, relató la KCNA, que detalló que "múltiples sistemas de lanzamiento de cohetes abrieron fuego al mismo tiempo" bajo la atenta mirada del joven líder, que quedó "satisfecho" con el resultado.

Kim ordenó a los soldados "acabar con los enemigos hasta el último hombre" y "enviarlos a todos al fondo del mar", en línea con el elevado tono belicista que viene exhibiendo el militarizado régimen norcoreano en las últimas semanas, según indicó la agencia.

Éstas han estado marcadas por la tensión, después de que Corea del Norte amenazara con la guerra y ataques nucleares preventivos a Corea del Sur y EE.UU., además de realizar diversos ejercicios militares en su territorio.

Estos días el líder norcoreano se ha volcado especialmente con el Ejército, uno de los dos puntales del régimen junto al Partido de los Trabajadores, con numerosas visitas a unidades, a las que ha transmitido el mensaje de que la guerra puede llegar en cualquier momento.

La escalada belicista del Norte es la respuesta del régimen tanto a las sanciones que la ONU impuso a principios de mes al país comunista por su última prueba nuclear de febrero como a las maniobras militares que Seúl y Washington llevan a cabo en la región.

Ambos aliados mantienen en curso desde el pasado día 1 el ejercicio anual de dos meses de duración Foal Eagle, que incluye diversas operaciones de tierra, mar y aire orientadas a optimizar la respuesta conjunta ante un hipotético ataque de Corea del Norte.

Por su parte, el ministro de Defensa de Corea del Sur, Kim Kwan-jin, recordó hoy a las tropas que deben estar alerta y responder con dureza a cualquier posible agresión de Corea del Norte.

EE.UU. mantiene unos 28.500 efectivos militares en Corea del Sur y se compromete a defender a su aliado desde la Guerra de Corea (1950-53), concluida con un armisticio que hasta el día de hoy sitúa como enemigos a los dos lados de esta nación dividida.