Tras el anuncio del presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero de adelantar las elecciones generales para el 20 de noviembre (estaban previstas inicialmente para marzo del otro año), el opositor Partido Popular (PP) y el sector empresarial aplaudieron el anuncio del Ejecutivo.
El líder del PP, Mariano Rajoy, dijo que esto es una "buena noticia" que su conglomerado "esperaba hace mucho tiempo" y que permitirá al país "salir de la grave situación" económica en que se encuentra. "Ahora los españoles tienen la palabra y pronto podrán decidir", dijo Rajoy, asegurando que el PP está preparado para protagonizar el cambio político en España.
El líder de la oposición se comprometió, de ganar las elecciones, dedicarse a "la recuperación económica social y política del país: afrontar la crisis, superarla y crear empleo".
En esta línea, otra de las principales dirigentes del PP, la presidenta de la comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se mostró satisfecha de que "por fin" vayan a celebrarse elecciones para no prolongar la "agonía" que en su opinión atraviesa el país. "Lo que hace falta es que los españoles vayan a las urnas y decidan quién tiene que llevar el timón de España que, según dicen las encuestas, será el señor Rajoy", apuntó.
El PP aventaja en siete puntos en intención de voto al PSOE, según las últimas encuestas y esta será la tercera vez que Rajoy se presenta a elecciones como candidato de dicho partido, después de los comicios de 2004 y 2008, ganados por Zapatero.
Desde el sector empresarial, que venía exigiendo también desde hace meses la convocatoria de elecciones, la Confederación Empresarial de Madrid afirmó que España necesita un nuevo gobierno que "le devuelva la credibilidad y la confianza" que está "perdiendo cada minuto" el Ejecutivo presidido por Zapatero.
El presidente de la asociación patronal, Arturo Fernández, estimó que el país sufre una "situación de bloqueo político" y necesita "reformas profundas".
También Francisco González, presidente del BBVA, el segundo mayor banco del país, consideró que Zapatero tomó una "decisión adecuada" y afirmó que el adelanto electoral es una buena noticia porque "España necesita un gobierno fuerte que tome decisiones que le sitúen otra vez a la altura de los países más importantes de Europa".
En tanto, el consejero delegado del Banco Pastor, Jorge Gost, estimó en declaraciones a medios locales que "cuanto antes" sean las elecciones "mejor", porque pondrá fin a la "provisionalidad" que transmitía el gobierno en sus decisiones y traerá "más certidumbre" a los mercados.