La Liga Arabe rechazó hoy la solicitud siria de reformular la hoja de ruta del plan de paz que prevé el envío de observadores al país para frenar la violencia que se extiende desde el inicio de las protestas contra el régimen de Bashar al Assad a mediados de marzo.

El secretario general de la organización, Nabil al Arabi, dijo en un comunicado que los cambios requeridos por el gobierno sirio "modificarían radicalmente la misión de los observadores árabes para proteger a los civiles en Siria".

"La Liga insiste en enfrentar la crisis dentro de un contexto árabe trabajando para poner fin a la violencia y respondiendo a las aspiraciones del pueblo sirio de reformas y cambios", añadió.

El ultimátum dado por la organización panárabe a Damasco para aceptar el acuerdo, con la amenaza de enfrentar sanciones económicas, terminó ayer, según detalla la agencia Dpa.

Según publica hoy el diario árabe Al Hayat, Damasco mostró reservas hacia el número de observadores -que estaba previsto que fuese de 500-; no estaba de acuerdo con la participación de algunas organizaciones de derechos humanos y también quería imponer la condición de acompañar a la misión con delegaciones sirias, detalla la agencia Efe.

MILICIANOS
Horas antes, Assad advirtió que continuará con su campaña de medidas de represión para aplastar a los "milicianos" que, dijo, masacran diariamente a los sirios. Assad dijo en una entrevista publicada el domingo por el diario británico Times que Siria no cederá y continuará resistiendo las presiones externas.

El mandatario dijo sentir "dolor y pesar" por el derramamiento de sangre y agregó que la solución es eliminar a los milicianos. Afirmó que 800 miembros de las fuerzas de seguridad sirios han muerto desde que comenzó la violencia hace ocho meses.