La actriz Lindsay Lohan irá a juicio para demostrar su inocencia en el caso del supuesto robo de un collar, a riesgo aún de ser condenada a pasar una temporada en la cárcel, según informó hoy TMZ.

Lohan, que se encuentra en libertad condicional, rechazó declararse culpable para evitar llegar a tribunales.

En caso de probarse que se apropió indebidamente de la joya, la protagonista de Chicas Pesadas podría ir a prisión al menos tres años, tanto por violar su libertad condicional como por robo, aunque quedaría exenta de pena si se confirma su inocencia.

La primera visita oral tendrá lugar el 22 de abril en Los Ángeles.

El pasado 22 de enero, el propietario de una joyería situada en Venice Beach, California, denunció el robo de uno de sus artículos y la Policía halló evidencias de la vinculación de Lohan con el caso.

Sin embargo, la intérprete sostiene que le prestaron el collar, avaluado en 2.500 dólares, y que a su estilista se le olvidó devolverlo.

Cuando fue acusada del robo, Lohan se encontraba en libertad condicional por una causa que se inició en 2007, tras ser detenida por conducir ebria, y que se complicó posteriormente cuando incumplió en reiteradas ocasiones las órdenes judiciales.

Por su parte, la fiscalía presentó hoy cargos contra el padre de la actriz, Michael Lohan, por golpear a su novia después de que ambos mantuvieran una discusión el 21 de marzo.

Michael Lohan se enfrenta a un máximo de un año de cárcel si resulta culpable del cargo de violencia doméstica en un juicio que comenzará el 23 de mayo.