El hecho que inicia la historia parece sacado de un manual de comedia romántica hollywoodense: Rob Norris (Rob Delaney), un hombre norteamericano cerca de los 40, conoce a la profesora irlandesa Sharon (Sharon Horgan) durante un viaje de trabajo a Londres, y tienen un fin de semana de sexo casual. Cuando él regresa a casa, recibe un llamado de ella, quien le cuenta que está embarazada. Rob regresa a la capital inglesa y en un arrebato le propone matrimonio, a lo que ella de forma igualmente impulsiva acepta.
Pero lo que ha transformado a la serie británica Catastrophe en una favorita de la crítica, y en una de las historias más aclamadas en la televisión actual, es la forma en que desarrolla esa premisa: más que explotar la dinámica de pareja dispareja entre los protagonistas, la trama, que mezcla drama y comedia, resulta un retrato de las complejidades de la vida adulta, el amor y la familia cuando la juventud ya quedó hace tiempo en el pasado.
Ahora, su tercera temporada llegará a Chile el martes 16 a las 23.00 a través de OnDirecTV (canal 201 en ese cableoperador), con seis nuevos episodios y siendo catalogada por la crítica como el mejor ciclo de la producción, sumándose a la elite de las comedias modernas que han reinventado el género aprendiendo a abrazar su lado más trágico.
La primera temporada siguió a Rob y Sharon -los actores protagonistas no sólo comparten el nombre con los personajes, sino que también crearon y son guionistas de la serie- y sus complejos primeros meses de relación, donde además de esperar un hijo, debían aprender a conocerse, mientras que el segundo ciclo utilizó un salto temporal para mostrar la vida de la pareja casada con ya un segundo niño recién nacido.
Los nuevos episodios retoman la trama minutos después del final de la última temporada; Rob confronta a Sharon tras haber encontrado el recibo de una píldora del día después, que ella tomó tras haber pasado una noche borracha con un músico, de la cual no recuerda el desenlace exacto. El hecho marcará sólo el inicio de una serie de problemas que deberá sortear la pareja, tanto internos como externos, agudizando las crisis maritales que vivieron en la temporada anterior. El resultado es lo que la crítica ha catalogado como la tanda de episodios más oscura de la producción. "Sí, Catastrophe se pone más seria en su nueva temporada, pero el lado bueno no debería sorprender a nadie: sigue siendo igual de graciosa", asegura la reseña de la revista The Hollywood Reporter, agregando: "la única queja que se puede tener no es que el drama interfiera con las risas, sino que las temporadas de seis episodios se siguen haciendo muy cortas".
El adiós de la princesa
Delaney y Horgan son los únicos dos miembros del elenco principal de la serie, siendo apoyados por un grupo de papeles secundarios que pueden ir variando de un episodio a otro. Entre ellos, el rostro más célebre es el de la fallecida Carrie Fisher, recordada como la princesa Leia de Star Wars, quien desde la primera temporada aparece ocasionalmente como la madre de Rob. El tercer ciclo no es la excepción. La actriz regresa en el último episodio de la temporada, en una participación que grabó en Londres en diciembre, tan sólo días antes de subir al avión en donde terminaría teniendo un ataque al corazón, que la dejaría en coma durante cuatro días antes de fallecer, a los 60 años. Así, su aparición en la serie marca la penúltima vez que su rostro se verá en la pantalla; la última será cuando su personaje más famoso regrese una vez más con Star Wars: Los últimos Jedi, en diciembre. El episodio donde participa está dedicado a ella.
Como Mia, la madre de Rob, Fisher básicamente interpreta una versión (no tan) exagerada de sí misma: sarcástica, directa, imprudente, aunque también con una extraña sabiduría detrás de sus ironías. Su última aparición es en su estilo: en medio de una tragedia que afecta a Rob y Sharon, Mia llega sin invitación de Estados Unidos a prestar su apoyo. Termina haciéndose amiga de su consuegra, lo que incomoda a la pareja, aunque no tanto como cuando decide derechamente quedarse en la casa de ellos sin si quiera avisar de su llegada. Pero también se da el tiempo de tener un honesto y emotivo diálogo con su hijo. Sobre sus últimas escenas, el portal de entretenimiento Collider aseguró: "Su última aparición es un resumen de Catastrophe: real, graciosa y honesta (aunque sea incómodo)".