Hasta hace 65 millones de años atrás, los ammonites, un tipo de molusco extinto cuya concha podía medir desde milímetros hasta dos metros de diámetro, estaban distribuidos por todo el mundo. Eso ha permitido que sus fósiles sirvan para datar la zona en que han sido encontrados. Y los descubiertos en Lo Valdés, a 93 kilómetros de Santiago, en San José de Maipo, hablan de hasta 150 millones de años atrás, cuando lo que conocemos como cordillera era fondo marino.
Reynaldo Charrier, geólogo y académico de las universidades de Chile y Andrés Bello, explica que las formaciones Lo Valdés y Abanico son las más ricas en fósiles de la Región Metropolitana, por la cantidad y el tipo de fósiles que se han encontrado. Además de los restos de vida marina de la primera, en la formación Abanico se han encontrado fósiles de mamíferos terrestres de entre 30 y 20 millones de años de antigüedad.
"El Cajón del Maipo, en general, tiene una muy buena exposición de rocas", dice el investigador. "Es un valle muy importante, la cuenca es sumamente grande, el agua ha producido un valle muy amplio que cubre zonas muy al norte y hasta el sur de Rancagua. Recoge agua de forma gigantesca y eso hace que el corte que forma el río en las rocas de la cordillera sea muy profundo, y eso favorece la exposición de las rocas", explica el experto.
Por eso es que es la zona es posible hallar fósiles dispersos por quebradas y valles con facilidad. Ello, a pesar del saqueo que se produce en la zona desde hace años.
La llamada quebrada de la placa roja, en Lo Valdés.
SAQUEO DE FOSILES
Por esta última razón es que la propia municipalidad prefiere no darle publicidad al lugar, pues no existe un plan estratégico para protegerlo. "Se fomenta muy poco, porque cualquiera puede acceder y la cantidad de fósiles que se han robado en los últimos siete años ha sido impresionante", dice Aron Toledo, asesor de la Municipalidad de San José de Maipo.
La ley de Monumentos Nacionales establece que los fósiles y los sitios donde éstos se encuentran son patrimonio de todos los chilenos, por lo que su extracción está prohibida sin autorización del Consejo de Monumentos Nacionales. Tomar un fósil sin un procedimiento científico puede dañar la información que contiene, por lo que se recomienda acceder a los lugares sólo con guías autorizados (como Cascada.net, G Bike tours o Rastour, en Facebook, todos operadores locales), que se preocupan de que los restos permanezcan en el lugar.
Proteger el lugar -el segundo más saqueado en el país después de Bahía Inglesa- es importante, pues según los investigadores la zona no sólo posee una gran cantidad de fósiles, sino que además de diversas edades; desde más de 150 millones de años, en río Colina, a otros más recientes que alcanzan un par de miles de años.
Parte de las quebradas con fósiles en Lo Valdés.