Que el mercado laboral no pasa por su mejor momento y que la tarea de buscar trabajo es ardua y difícil es algo de lo que pueden dar fe las 200 personas que se postularon en Londres para convertirse en un "muerto viviente", un trabajo poco convencional que sin embargo ha suscitado mucho interés.
Tan curioso puesto de trabajo fue creado por el London Bridge, una de las principales atracciones turísticas de la capital británica que busca ahora "zombies... vivos o muertos".
El salario que percibirá el aspirante seleccionado será de 30.000 libras (26 millones de pesos) anuales, un poco por debajo del salario promedio en el Reino Unido y el elegido pasará los días "asustando a los visitantes" en las "espeluznantes catacumbas" que hay debajo del puente, según el anuncio de trabajo publicado por el London Bridge.
Esta atracción turística es la que mayor número de "zombies" emplea de toda la ciudad (varias docenas), aunque en anteriores convocatorias tan sólo se habían presentado unos 50 aspirantes, una cuarta parte de los interesados ahora.
El responsable de la contratación de este nuevo "muerto viviente", James Kislingbury, explicó al "Evening Standard" que los candidatos deben "ser extrovertidos, tener ganas de divertir a la gente y estar en forma".
Esta última condición se debe a que los "zombies" del London Bridge tienen que "ir persiguiendo a la gente por ahí, a veces con una motosierra", lo que obliga a cumplir ciertos requisitos físicos básicos.
Kislingbury destacó que pese a lo que pueda parecer, los actores profesionales no tienen por qué ser los mejores "zombies", ya que "están más acostumbrados a recitar sus líneas a la audiencia que a interactuar con el público y asustarlo lo más posible".