El ministro de Relaciones Exteriores británico, Philip Hammond, y su homólogo japonés, Fumio Kishida, se juntaron hoy en una reunión en la ciudad de Londres, debido a la situación de los rehenes amenazados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).

El encuentro en la sede del Foreign Office en la capital británica, al que también asistió el ministro británico de Defensa, Michael Fallon, es la primera reunión formal entre ambos países para tratar cuestiones de seguridad y defensa.

Para el responsable de la diplomacia británica, la visita de Kishida, simboliza "de un modo muy concreto el compromiso de Japón con la comunidad internacional y el papel cada vez más importante que está desempeñando para asegurar la paz internacional".

Hammond subrayó que uno de los temas principales de la reunión fue "el reto de lidiar con el Estado Islámico" y las posibles soluciones para la "crisis de los rehenes" nipones.

El viaje del ministro japonés se produce horas después de que el primer ministro nipón, Shinzo Abe, ordenase reforzar los esfuerzos diplomáticos para salvar a los dos rehenes que los extremistas islámicos amenazan con ejecutar el próximo viernes.

En un vídeo difundido por el EI, los terroristas amenazaron con matarles si no reciben 200 millones de dólares (172 millones de euros), una cantidad similar a la que Abe comprometió la semana pasada para ayudar a los países de Oriente Medio que combatan a los yihadistas.

Kishida, por su parte, hizo un llamamiento a reforzar los lazos en la lucha contra el terrorismo con el Reino Unido.

"Japón condena enérgicamente los deplorables actos de terrorismo que estamos viendo con la situación de los rehenes y también los atentados en París", señaló el ministro nipón, que resaltó que ambos países "pueden cooperar en la lucha contra el terrorismo".

Japón y el Reino Unido, "dos países que han contribuido ampliamente a la paz y la prosperidad del mundo, deben y pueden cooperar para atajar las amenazas que afronta la comunidad internacional", afirmó.