Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) cumplió todos los pronósticos que le daban como favorito para el Gran Premio de Portugal de MotoGP y fue el más rápido en la sesión oficial de entrenamientos para la carrera que mañana se va a disputar en el circuito de Estoril.

El italiano Valentino Rossi (Ducati) fue la nota negativa al lograr como mejor resultado la novena posición, aún con la mejor Ducati en pista, a más de un segundo del mejor tiempo de la categoría.

Marco Simoncelli (Honda RC 212 V) fue el dominador de los entrenamientos libres y dio la impresión de que "Súper Sic" sería también el más rápido en los oficiales, pero se tuvo que rendir a la evidencia de la superioridad del campeón del mundo, además de rodar por los suelos en la última parte de la clasificación.

Simoncelli comenzó mandando también en las pruebas libres, pero una vez más su fama de agresivo y excesivamente fogoso le precedió y acabó haciéndole rodar por los suelos al perder agarre la rueda delantera de su moto, lo que hizo que se cerrase la dirección de la Honda y moto y piloto acabaron en el piso.

Por entonces, Simoncelli ya se había visto relegado de la primera posición por el gran especialista de Estoril, el campeón del mundo Jorge Lorenzo, quien aunque no llegó a los tiempos que le permiten mantener el récord del circuito portugués, en gran medida como por las cambiantes condiciones meteorológicas.

El rendimiento del español cumplió con todas las previsiones, en tanto que el de Marco Simoncelli, al final segundo, sorprendió en cierta medida, pues con ello relegó tanto a Dani Pedrosa (Honda RC 212 V) como al australiano Casey Stoner (Honda RC 212 V).

Entre todos ellos apenas hubo dos décimas de segundo de diferencia, lo que no les permitirá ningún descanso mañana cuando se apague el semáforo de Estoril.

A partir de ahí, desde la quinta plaza del estadounidense Ben Spies (Yamaha YZR M 1), la situación es distinta, puesto que éste se encuentra ya a más de siete décimas de segundo y eso en Estoril ya es mucha ventaja.