1. Cañón Antelope
Arizona, Estados Unidos

Es el cañón más visitado y fotografiado del suroeste americano (estado de Arizona), donde se puede apreciar una obra maestra de la naturaleza, llena de colores fantásticos.

Se dice que fue descubierto por una niña navajo mientras cuidaba su rebaño de ovejas. Es una enorme grieta excavada en un bloque de piedra arenisca de color cobre. Dentro, hay cámaras y corredores cuyas paredes forman remolinos erosionados con líneas de millones de años por el efecto del viento y del río. El sol y sus rayos de luz se filtran hasta el suelo y todo el cañón se ilumina con matices amarillos, naranja y cobre.

2. Ruta del Círculo Dorado
Reykjavik, Islandia


Islandia es uno de los países más septentrionales del mundo. Desde su capital, Reykjavik, nace una ruta de 300 kilómetros por el sur de la isla, que resume los principales encantos de estos parajes exóticos. Se pueden encontrar  glaciares, archipiélagos, aguas termales y célebres géiseres, como Geysir, el primero que se conoció en Europa. Aquí, además, se ubica la gran atracción del momento: el volcán Eyjafjalla, que desde el 20 de marzo tiene convertidas las rutas aéreas europeas en un lío, producto de las cenizas generadas por su erupción. El circuito es de fácil acceso y la mejor manera de recorrerlo es en auto. 

3. Valle de Jiuzhaigou
Sichuan, China


Su nombre significa "el valle de las nueve aldeas", porque reúne a siete comunidades tibetanas en esta zona del distrito de Nanping, extremo norte de la provincia de Sichuan. La belleza natural de este lugar es tal que los chinos señalan en un refrán que después de ver Jiuzhaigou, no es necesario contemplar otros paisajes. Cascadas, arroyos, bosques y lagos de cinco colores se conjugan en esta área  de 72 mil hectáreas. También se caracteriza por ser hábitat de los osos panda. La mayoría de los turistas llega en bus, en un viaje de 10 horas desde Chengdu, aunque hay vuelos directos desde Beijing.

4. Meteora
Tesalia, Grecia


Es un paisaje extraño pero sobrecogedor, que ha sido esculpido por el viento durante miles de años. Se trata de bellos monasterios levantados en el siglo XIV -a más de 600 metros de altura-, que se elevan al cielo bajo la sombra de las montañas, justo debajo de la ciudad de Kalampaka, a 320 km de Atenas, en Grecia.

Pueden visitarse en un recorrido de 17 kilómetros a pie, que se inicia en Kalampaka y que pasa por empinados caminos e interminables escaleras, aunque hay excursiones de agencias que suavizan un poco el tour.

Las mejores épocas del año para conocer Meteora son primavera y otoño, cuando las temperaturas son más agradables y hay menos aglomeración de turistas. Muchos turistas llegan hasta acá desde Atenas, en visitas de dos días.

5. Parque Nacional del cañón de Bryce, Estados Unidos

A pesar de su nombre, este parque no es un cañón, sino un anfiteatro natural gigante, formado producto de la erosión. Esta ha escarbado durante miles de años y ha dado lugar a arcos y estructuras geológicas laberínticas -llamadas hoodoos (chimeneas de hadas)- que, con sus tonalidades rojas, anaranjadas y blancas, crean un paisaje único y sobrecogedor.

Una carretera de 30 km recorre el parque y atraviesa los 13 miradores que existen sobre los anfiteatros. Además, hay ocho senderos que pueden recorrerse en excursiones de medio día.

El parque está en el estado Utah, aproximadamente, a 410 km (270  al sur de Salt Lake City).

6. Campos de lava del volcán Kilauea, Hawaii

Catalogado como maravilla biológica y geológica, el Kilauea es uno de los mayores volcanes del planeta y uno de los más activos. Lleva más de 10.000 días en erupción, desde 1983.

Situado al sur de la isla de Hawaii, tiene 1.111 metros de altura y su cráter, una profundidad de 165 metros. Visitarlo es adrenalínico, ya que es posible caminar a escasa distancia de los ríos de lava candente, varias agencias organizan excursiones pero también se puede por cuenta propia, siguiendo ciertas recomendaciones de seguridad. La mejor hora para visitarlo es después del atardecer, cuando más se visualizan las incandescencias y la corriente de lava y de humo que llega hasta el mar.

7. Gran Cañón del parque Yelowstone, EEUU

El parque nacional más antiguo del mundo (1876) es conocido por su vida salvaje y por sus fuentes geotermales -aquí están dos tercios de todos los géiseres-, en especial por el Old Faithful Geyser. Tres millones de personas lo visitan cada año y, de ellos, más de 200 mil lo hacen en invierno. En verano, cuatro mil personas trabajan para recibir a los visitantes, hay nueve hoteles, comercio y 200 campings.

Dentro del parque, el río Yellowstone ha cavado un cañón magnífico con dos cascadas que pasan por rocas amarillas. Favorito de fotógrafos y observadores de la naturaleza, el Gran Cañón de Yellowstone tiene 275 m de profundidad.

8. Ta Prohm
Siem Reap, Camboya


Los templos más populares de Angkor lo son gracias a los árboles que crecen entre las ruinas y que están en medio de una selva tropical que parece querer devorarse todo.

Estos templos, que llegaron a albergar a 80 mil habitantes, se levantaron en el siglo XII, pero durante el XV la zona fue abandonada. Sólo después de cinco siglos fue redescubierta y, sus ruinas, reconocidas por su particular estado de conservación combinado con gigantescos ficus y ceibos que, en ocasiones, no permiten el ingreso a las instalaciones.

Al igual que en todo el complejo de Angkor, es mejor madrugar un poco para evitar las grandes hordas de turistas.

9. Salar de Uyuni
Bolivia


Es el más cercano de todos los lugares presentados en Trip Advisor y, seguramente, el más conocido en Chile. Considerado como el salar más grande y alto del mundo, permite contemplar una irreal explanada blanca de 10 mil metros cuadrados, que  sorprende sobre todo en los días posteriores a las lluvias cuando se convierte en un nítido e inmenso espejo. Además, en el salar se presentan otros atractivos, como la Isla Pescado o "Cujiri", habitado por cactus gigantes de seis metros de altura. A lo largo del salar, se ubican hoteles contruidos completamente de sal. Desde Chile, hay diversos tours partiendo en San Pedro de Atacama, de tres a cuatro días, por $ 75.000 aprox.   

10. Great Ocean Road
Victoria, Australia


Es una sinuosa carretera que recorre 243 km de la costa sureste de Australia, entre las ciudades de Torquay y Warrnambool, en el estado de Victoria. La belleza de la ruta permite ir contemplando diversos monumentos naturales como Los Doce Apóstoles, formados por la erosión de la roca, que también esculpen arcos y quebradas. A diferencia de otras carreteras de Australia, aquí hay diversos poblados que permiten estar siempre comunicado. 

La mejor forma de acceder es a través de Melbourne. Varias agencias ofrecen el tour por esta carretera a unos US$ 53, pero lo mejor de recorrerla es arrendar un auto.