Goles, títulos y espectáculo. Eso fue Cristiano Ronaldo durante 2014, ganador del premio Balón de Oro de la FIFA y la revista France Football gracias a la elección de un grupo de directores técnicos, futbolistas y periodistas especializados de todo el mundo.

El atacante de Real Madrid justificó con creces su distinción. Convirtiendo 61 goles en 60 partidos, comandó a los merengues a la obtención de cuatro títulos: Liga de Campeones, Copa del Rey, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes.

No obstante, fue en Champions League donde alcanzó su mayor rendimiento del año, al anotar 17 tantos para, de paso, superar el récord de goles anotados por un jugador en una sola edición del certamen continental y empujar a su equipo a la obtención de la décima corona europea de su historia.

Mientras, el fracaso en el Mundial de Brasil -eliminado en primera ronda con Portugal- parece no haber sido impedimento para que el ex Manchester United fuera reconocido como el mejor del orbe por tercera vez en su carrera (ganó el premio por primera vez en 2008) y segunda de manera consecutiva.

Con esto, Ronaldo ingresó al selecto grupo de jugadores con tres trofeos de mejor del mundo: Johan Cruyff (1971, 1973, 1974), Michel Platini (1983, 1984, 1985) y Marco Van Basten (1988, 1989, 1992) y sólo es superado por Messi, único que ha ganado cuatro veces el trofeo.

El portugués ha mantenido un ritmo trepidante. Real Madrid juega a su velocidad y, con eso, es uno de los mejores equipos del mundo: líderes en La Liga y clasificados a octavos de final de Copa de Campeones como uno de los máximos aspirantes al título a raíz del buen juego desplegado en la fase de frupos.

"Ganar un trofeo de esta naturaleza es algo único. Nunca pensé en ganar tres veces este premio. Estoy muy feliz y agradezco a todos quienes han hecho posible esto: mi entrenador, mis compañeros, la afición y, por supuesto, mi familia", aseguró Ronaldo, visiblemente emocionado, una vez confirmada su elección como el mejor del mundo.