1. Emma Watson: feminismo
La actriz que saltó a la fama en el papel de Hermione Granger en la adaptación cinematográfica de los libros de Harry Potter, el niño mago, soprendió con un emotivo y contundente discurso ante la Asamblea de Naciones Unidas sobre el feminismo e igualdad de género el 22 de septiembre pasado.
Watson había sido nombrada seis meses antes como embajadora de buena volunta de ONU Mujeres. Y en su primera aparición ante ese foro internacional, habló del feminismo en términos amplios que, según algunos, rompía estereotipos.
En lo que sí hubo consenso es en que la actriz, de 24 años, tocó una fibra con las nuevas generaciones. Lo que se tradujo en una tormenta en redes sociales: junto con un apoyo abrumador, Watson llegó a recibir amenazas.
2. Jennifer Lawrence: privacidad
La protagonista de "The Hunger Games", Jennifer Lawrence, se vio sin querer en el ojo de la tormenta en septiembre pasado, cuando fotos de actrices desnudas o en poses provocativas hackeadas de la nube fueron filtradas a internet.
Las fotos no eran solo suyas. También había de Ariana Grande y Victoria Justice, quienes negaron que fueran reales. Y de Mary Elizabeth Winstead, quien les restó importancia, señalando que eran imágenes que había tomado años atras, con su marido en su hogar.
Pero Lawrence reconoció la autenticidad de las fotos y, tras varias semanas de silencio, salió a la carga. En una entrevista con la revista Vanity Fair, dijo que el robo de sus fotos no había un escándalo, sido un "crimen sexual".
En todo caso, la forma como fueron robadas las fotografías fue objeto de un fuerte debate, por revelar la vulnerabilidad de la plataforma de almacenamiento de datos iCloud.
La compañía Apple negó que se hubiera tratado de una falla general. Como haya sido, el caso reforzó las lecciones que ya debíamos haber aprendido sobre los riesgos a que se expone la información que conservamos y compartimos -o no queremos compartir- por medios tecnológicos.
3. Sofía Vergara: "sexismo"
La actriz colombiana Sofía Vergara dio de qué hablar en agosto de este año en el marco de la entrega de los premios Emmy. No porque recibiera galardones -la protagonista de la exitosa serie "Modern Family" no estaba nominada este año-, sino por una intervención que algunos calificaron de "sexista" y "fuera de lugar".
Mientras que el presidente de la Academia de la Televisión de Estados Unidos, Bruce Rosenblum, daba su discurso tradicional, Sofía Vergara, subida a una plataforma, giraba 360 grados, mostrando su célebres curvas.
Se trataba de una broma, en la que Rosenblum jugaba con la idea de "darle al público lo que quiere ver" entre protestas por parte de Vergara. Pero a periodistas del espectáculo y parte de la audiencia no les pareció gracioso. "Abiertamente sexista", "extraño", "algo que menoscaba sus aptitudes como actriz", "la presentaron como un objeto", son algunos de los calificativos que se le endilgaron aquella noche al episodio.
La aludida -Vergara- dijo que la polémcia era "ridícula".
Y llamó a los involucrados a "tomarse las cosas más a la ligera". Lo que, quedó claro, no era tan fácil.
4. Renée Zellweger: belleza
Cuando la actriz estadounidense Renée Zellweger apareció en una fiesta de la revista Elle, el dedo acusador no recayó sobre un mundo machista, una industria filmográfica explotadora o unos hackers abusadores, sino sobre ella misma.
En las fotos, Zellweger apareció "irreconocible". Comentaristas de prensa lo atribuyeron a un "abuso" de cirugías plásticas. Explicado, en parte, por las dificultades que las actrices mayores de 40 años (Zellweger tiene 45) tienen para obtener buenos papeles en el cine.
Ella, por su parte, señaló que tanto aspaviento era "absurdo".
Su cambio de apariencia se debe, explicó, a que estaba viviendo una vida "diferente, feliz y más plena".
Mientras tanto, los columnistas del espectáculo se pagaban y daban el vuelto: los unos llamando a los otros hipócritas, y los otros criticando la falsedad de las cirugías plásticas.
5. La hermana Cristina Scuccia: rompiendo moldes
Y en una nota menos polémica y más sorpresiva, cerramos esta lista con la hermana Cristina Scuccia, la sensación de los programas de talento de Italia en 2014.
La monja triunfó en la versión italiana del programa de telerrealidad The Voice, en la que los concursantes pasan por una primera "audición ciega", en la que los jueces los escuchan sin verlos, dándoles la espalda.
"Soy una monja totalmente verdadera", le explicó a los atónitos jueces, una vez se dieron vuelta.
En la final del concurso, Scuccia los cautivó con el tema "No One" de Alicia Keys y se convirtió en todo un fenómeno.