Los bastiones y puntos débiles de Piñera, Guillier y Sánchez

No importa cuál sea el parámetro por el que se le mida: salvo cuando se agrupa por identificación política a los encuestados, el candidato presidencial de Chile Vamos, Sebastián Piñera, lidera en prácticamente todos los cruces.

Al analizar un nuevo desglose entregado por el Centro de Estudios Públicos (CEP) a partir del sondeo dado a conocer el miércoles y tomando la fórmula del "votante probable" en urna, el ex presidente incluso gana en el segmento E, el con menores ingresos de la población: tiene 28,5% de las menciones, contra 22,1% de Alejandro Guillier.

Piñera tiene apenas un punto de diferencia entre hombres y mujeres: 44,9% contra 43,9%. Hay más diferencia al separar zonas urbanas y rurales (45,4% contra 37,0%). Y su mejor nicho en términos de edad es entre los 18 y los 44 años. En ese grupo, Piñera obtiene entre 48 y 49 puntos, dependiendo del corte por el que se le mida. Es decir, más de 30 puntos de distancia con el aspirante más cercano.

Otro dato interesante del sondeo es que Piñera logra el 81% de la intención de voto entre quienes se declaran de derecha, un grupo en que José Antonio Kast obtiene el 3,2%, apenas un par de décimas más que su promedio.

El dato da para pensar que la estrategia del denominado "voto útil" impulsada por el ex presidente y su equipo de campaña estaría surtiendo efecto, y que el diputado no estaría consiguiendo penetrar en el electorado potencialmente más proclive a su postulación.

De apenas 4,1% entre los menores de 24 años a 25,8% entre los mayores de 55. Esa es una muestra de las amplias diferencias que enfrenta Alejandro Guillier, según lo refleja la encuesta CEP.

Al igual que Piñera, apenas tiene un punto de diferencia entre hombres y mujeres, aunque en su caso es en la segunda situación donde logra un mejor desempeño: 19,2% contra 20,2%.

El comportamiento electoral en este caso es claro. Guillier va mejorando en la medida que aumenta la edad y que disminuye el nivel socioeconómico.

Algo llamativo es que el abanderado de La Fuerza de la Mayoría obtiene un desempeño casi idéntico entre quienes tienen 8 o menos años de educación y entre los que tienen más de 13 años.

Un problema que evidencian los datos del sondeo es que el senador no ha logrado sumar a una amplia mayoría de los votantes de izquierda: el 52,4% de quienes declaran esa posición política dice que votaría por él, muy lejos de lo que ocurre con Piñera entre los votantes de derecha.

Y algo aún más preocupante es la brecha de entusiasmo. Si casi dos tercios de quienes se declaran de derecha están en la categoría del "votante probable" (64,2%), entre quienes se manifiestan de izquierda la cifra es de 55,7%, casi nueve puntos más baja.

Con 15,4% de la intención de voto, el grupo de votantes probables entre 25 y 34 años es en el que Beatriz Sánchez tiene un mejor desempeño.

En los otros grupos etarios, su resultado varía entre el 6,5% y el 9,4%, siempre bajo los dos dígitos. La abanderada del Frente Amplio obtiene también dos puntos y medio menos en las zonas rurales que en las urbanas (6,4% contra 8,8%).

Al enfocarse según grupos socioeconómicos, Sánchez consigue sus apoyos más altos entre quienes son identificados como ABC1, C2 y C3 (9,4%, 8,3% y 9,8%, respectivamente). Y su desempeño mejora en la medida que aumenta el nivel de escolaridad de los encuestados: si entre quienes estudiaron 0 a 3 años logra el 3,4% de las menciones, al ver los que cursaron más de 13 años de estudios la cifra alcanza 9,1%.

Es en los sectores bajos que Sánchez ha enfrentado problemas. Un dato que ilustra esta realidad: no solo Guillier la supera ampliamente en los segmentos D y E, sino que también aparece por detrás de Marco Enríquez-Ominami, la gran sorpresa de la última encuesta del CEP y quien llega a 9,7% y 14,1% en esos respectivos grupos.

Al mirar las cifras de los restantes candidatos, una situación aparece como llamativa: la de la abanderada de la DC, Carolina Goic, entre los menores de 24 años.

De acuerdo con el desglose entregado por el CEP, en ese nicho la senadora -que el miércoles acusó una presunta "colusión de encuestas"- estaría segunda tras Piñera, con el 16,6% de los votos. El resultado es curioso, considerando que en el resto de los grupos medidos logra 5% como su mejor resultado.