El fútbol ha cambiado mucho con el paso de los años en cuanto a la velocidad del juego, la intensidad y su globalización, pero el cambio más radical es la manera en la que cada uno de nosotros lo percibe a medida que va creciendo.
Eso sin mencionar cómo debemos adaptar nuestro juego a las limitaciones que van apareciendo con la edad.
Es por eso que nació "fútbol caminando", una versión del juego que sigue manteniendo el gol como el fin último del deporte más popular del planeta y que se basa en las reglas que rigen en el fútbol de sala, que disputan dos equipos de cinco jugadores cada uno.
La única diferencia es que no se puede correr.
Ritmo pausado
Este tipo de fútbol, en el que se juntan personas desde los 50 años de edad hasta jugadores con más de 80, ofrece una oportunidad para que se reencuentren con un deporte al cual han estado vinculados desde niños, pero que sienten que ya no están en capacidad de hacerlo a un nivel competitivo.
La popularidad del deporte está aumentando rápidamente en Reino Unido como se refleja en la aparición de más de 250 clubs.
Mike Bushell, corresponsal de deportes de la BBC, destacó este crecimiento.
"El juego está diseñado para motivar a personas de avanzada edad a que regresen al deporte sin presión ni demasiadas exigencias, evitando que sufran infartos u otra consecuencia de gravedad".
El doctor Stefan Taylor, especialista en programas para el mejoramiento de la salud, indico que el fútbol caminando es una buena manera de comenzar o regresar a hacer deporte en un ambiente seguro.
"Está la actitud de una personas que no hacen nada de ejercicios durante 20 años y creen que pueden llegar y hacer lo que hacían cuando dejaron de jugar. Pero entonces encuentran que les duelen las articulaciones, la rodilla no funciona igual e incluso corren el riesgo de aumentar mucho la presión sanguínea", advirtió el doctor Taylor.
"Esto es un punto de partida".
Paso ligero
Al fomentar la actividad física entre las personas mayores, el futbol caminando influye positivamente en su salud y vitalidad.
En un reciente estudio publicado por científicos de la Universidad de Cambridge concluyó que la falta de ejercicio puede ser tan mortal como la obesidad en las personas.
En la investigación los doctores recomendaron caminar con un paso ligero por 20 minutos al día, algo que se logra fácilmente dentro del campo como lo pudo comprobar Bushell.
"Exige un gran esfuerzo físico, más allá de que se haga caminando. A partir de allí se trata del que mejor se posicione, la táctica y pensar en la jugada siguiente antes de que ocurra", contó el corresponsal de la BBC.
El problema surge cuando aumenta la adrenalina durante el partido y se huele una ocasión clara de gol.
"Al principio es difícil no acelerar y comenzar a correr. Es algo instintivo y caminar no parece un reflejo natural, pero rápidamente te das cuenta que el nivel de pases es muy conciso y que los futbolistas piensan mucho en el juego".
Los jugadores que corren son sancionados con una falta.
Ian Hughes, exfutbolista profesional y entrenador de fútbol caminando, explicó que es necesario desarrollar facetas del juego que compensen la falta de velocidad.
"El ritmo del partido ha cambiado mucho. Pero en lugar de correr a 160 kilómetros por hora, esto busca reducir la velocidad para asegurar que los jugadores dominen un nueva habilidad, que es pasar el balón al pie", dijo Hughes.
La técnica que muestran los jugadores en el fútbol caminando ha causado tal impresión por su efectividad que hay clubs que están incorporando sesiones de esta versión de fútbol en los entrenamientos de sus equipos juveniles y las academias.
Pero el fútbol caminando trasciende de estos sistemas, de tácticas o estrategias. Lo que está en juego es la vida de muchas personas que vuelven a vibrar con un deporte que les sigue dando la satisfacción del gol.