Rápido ascenso. Sergio Elías Jadue no tuvo problemas para mantener la representatividad del fútbol chileno en la Conmebol, organización que este martes en Luque, Paraguay, deberá trazar sus próximos pasos luego de la salida de Nicolás Leoz, después de 27 años en el cargo.
El nombre del calerano en la sede de la confederación suena con fuerza a la espera de que los 10 presidentes sudamericanos definan si el uruguayo Eugenio Figueredo completará el período de Leoz hasta el 2015 o si habrá nuevas elecciones para conocer al sucesor. El oriental tiene peso al interior, teniendo en cuenta sus vínculos con Paco Casal, el mayor controlador de los derechos televisivos en Sudamérica.
"En principio, queremos cumplir con el reglamento vigente", comenta a La Tercera el mandamás colombiano Luis Bedoya, quien lidera, junto a Ecuador y Bolivia, una de las facciones de la Conmebol.
El otro bloque lo componen Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Chile, mientras Venezuela sostiene un rol antagónico a la labor del ecuatoriano Luis Chiribiga, por lo que su voto sería disidente al líder de los del Guayas. "La posición más clara parece ser la de cumplir el período hasta el 2015", agrega el dirigente uruguayo Sebastián Bauzá.
Todo lo anterior anticipa que los estatutos se mantendrán, por lo que sólo habrá que definir un nuevo vicepresidente, cargo al que aspiran el paraguayo Juan Angel Napout y el boliviano Romer Ozuna. En menor medida, Jadue también aparece con opciones.
Cercanos al timonel chileno adelantan que, independiente del respeto que genera en Asunción, su momento para asumir un cargo en la sede de Luque no sería el presente, sino en 2015, año en que Chile será anfitrión de la Copa América y el Mundial Sub 17.
Por ahora, Jadue apoyará la opción de Napout. El "guaraní" es uno de los dirigentes más cercanos al chileno. De hecho, en el viaje de la Selección a Belo Horizonte, el paraguayo se dio tiempo para visitar al chileno en las escalas realizadas en Asunción, el lunes y el jueves. La segunda cita se produjo luego de que el calerano decidiera quedarse un día en Paraguay analizando la opción de que Napout asuma la testera de la Confederación y él ostente un cargo relevante.
La chance de Ozuna, como escolta de Figueredo, tampoco es descartable para la ANFP, considerando el lazo de amistad que existe entre Jadue y el timonel altiplánico Carlos Chávez, con quien ha compartido eventos sociales, como el matrimonio del hijo de este último, en enero, en Santa Cruz de la Sierra.
LOS MÉRITOS DEL DIRIGENTE CHILENO
En los dos años al mando de la ANFP, Jadue logró posicionarse en la Conmebol. En Asunción destacan su juventud y ganas de trabajar. "Es participativo, joven e impetuoso. Es una buena carta para el futuro", dice el "cafetero" Bedoya, mientras Bauzá destaca que "ha aportado buenas ideas para ayudar al organismo".
Gracias a su conocimiento de las redes sudamericanas, el timonel del Sifup, Carlos Soto, subraya los factores que facilitan la labor de Jadue en la Conmebol.
"La imagen de Chile ayuda mucho. El país es sinónimo de seriedad y honestidad. Otro factor a favor es que Jadue es de los pocos presidentes ejecutivos en Sudamérica. Se dedica por completo a la actividad y tiene plena disposición a viajar a reuniones, tanto dentro como fuera del continente", sostiene el líder sindical.
Lo anterior lo refrenda la última presencia de Jadue en Panamá, en donde se realizó la reunión de la Concacaf que selló el adiós de Leoz. Ahí, el paraguayo recibió un ultimátum del timonel de FIFA, Joseph Blatter, para aclarar su futuro.
Las buenas relaciones de Jadue con el argentino Julio Grondona y el brasileño José María Marín son otro punto a favor. Ambos representan un fuerte núcleo de poder, al que el chileno ha sabido acercarse, pensando en una carrera futura en la Confederación.
El abogado nacional partirá mañana a Asunción, en donde seguirá aspirando, en el futuro, a liderar la renovación del ente que rige el fútbol sudamericano.