John Lasseter ha sido apuntado como el nombre más influyente del cine animado desde el mismísimo Walt Disney. El que por dos décadas ha sido el director creativo de Pixar, habiendo dirigido la primera película del estudio, Toy Story, además de éxitos como Cars, ocupa también hace diez años el mismo cargo en las cintas de animación de Disney, liderando la transición de la compañía desde las películas creadas a través de la técnica "lápiz y papel" a las cintas con animación 3D computarizada, desde Frozen hasta Zootopía.
Lasseter parecía generar admiración y respeto como pocos entre sus pares. El ejecutivo era elogiado frecuentemente como un visionario, cuyo olfato para el entretenimiento infantil y familiar ha permitido que las cintas animadas de Pixar y Disney sumen 11 Oscar a Mejor Película Animada desde que se creó el premio en 2001, recaudando además miles de millones de dólares en taquilla.
Pero la idolatrada imagen pública de Lasseter se fracturó la tarde del martes. Fue primero The Hollywood Reporter quien anunció que el ejecutivo había enviado un memo a los empleados de Pixar y Disney, revelando que tomaría un permiso de excedencia de su cargo por seis meses para analizar sus "errores", luego de que, según él, algunas personas dentro de la compañía le hicieran ver su incomodidad con algunas de sus acciones.
Horas después, los medios Vanity Fair y Variety publicaron extensos reportajes sobre los problemas de conducta que por años Lasseter habría presentado dentro y fuera de las oficinas de Pixar y Disney, entre los que se incluyen incómodos abrazos a sus empleadas, saludos de beso en la boca a estas mismas y comentarios inapropiados sobre sus atributos físicos, además de minimizar sus opiniones y aportes en la compañía.
Una ex empleada de Pixar aseguraba que, bajo el liderazgo de Lasseter, el ambiente en la compañía era "sexista y misógino", y que las mujeres frecuentemente recibían advertencias sobre su jefe: "le gusta abrazar a las chicas bonitas. Y puede que intente darte un beso en la boca", aseguró otra fuente.
Todos los testimonios recogidos en ambos reportajes, que incluyen antiguos y actuales empleados de Pixar, se realizaron de forma anónima, debido al temor a las posibles represalias por parte del entorno del poderoso ejecutivo.
Falta de representación
"John es como un niño hormonal de 13 años al que hay que tener controlado todo el tiempo", dijo una de las fuentes a Vanity Fair, explicando que al ejecutivo solía pasársele la mano con el alcohol en las fiestas tanto de su compañía como de la temporada de premios de Hollywood, y que terminaba siendo excesivamente cariñoso con sus subordinadas.
Pero las insinuaciones tanto físicas como verbales no eran el único problema que se le atribuye al realizador. Pixar por años ha sido criticado como estudio por su falta de confianza en directoras y guionistas femeninas: sólo una de sus películas ha sido dirigida por una mujer -Brenda Chapman, de Valiente, que ni siquiera completó el proyecto y fue reemplazada por un hombre-, y ha tenido sólo 11 guionistas femeninas o de color (de 109 posibles). Disney ha sido algo más equitativo en ese sentido bajo su mandato.
La actriz Rashida Jones y el guionista Will McCormack emitieron una declaración luego de que The Hollywood Reporter afirmara en un artículo que la dupla, que originalmente iba a escribir Toy Story 4, dejó el proyecto luego de que Lasseter se le insinuara a Jones. Ambos desmintieron esa información, pero aseguraron: "nos alejamos por diferencias creativas y filosóficas. Hay una gran cantidad de talento en Pixar, y seguimos siendo fanáticos de sus películas, pero también tienen una cultura en donde las mujeres y las personas de color no tienen una voz equitativa".
Pixar estrena hoy en Chile y buena parte del mundo Coco (ver crítica en página 41), su nueva película, centrada en la festividad mexicana del Día de los Muertos. La compañía junto a Disney ya estarían buscando una solución definitiva al problema de Lasseter: según Vanity Fair, a pesar de que la ausencia del ejecutivo es supuestamente temporal, ambas compañías evalúan nombrar a Pete Docter, director de Up e Intensa-Mente, como el nuevo jefe creativo de sus estudios animados.