El año pasado, el mundo se volvió un poco menos pacífico, siguiendo una tendencia que ya se extiende por siete años. Esa fue la conclusión a la que llegó el Indice de Paz Global, elaborado por el Instituto de Economía y Paz  (IEP) de Australia y que señaló que la actividad terrorista, el número de conflictos, la cifra de refugiados y las personas desplazadas fueron los principales contribuyentes al continuo deterioro en la paz global el año pasado, rompiendo una tendencia de 60 años de incremento de la paz global, que se remonta al final de la Segunda Guerra Mundial.

El instituto elabora el ranking de las naciones más pacíficas usando 22 indicadores en 162 estados independientes, de acuerdo con la seguridad en la sociedad, niveles de conflicto internacional y doméstico y el grado de militarización. El impacto económico de contener y tratar las consecuencias de la violencia global, el año pasado, se estimó en US$ 9.800 millones, lo que equivale al 11,3% del PIB global. 

"Muchos macrofactores han impulsado el deterioro de la paz en los últimos siete años, como las repercusiones económicas que continúan de la crisis global, los ecos de la Primavera Arabe, y la propagación continua del terrorismo. Dado que es probable que estos efectos continúen en el futuro cercano, un repunte fuerte en la paz es improbable", explicó en el reporte Steve Killelea, fundador y presidente ejecutivo de IEP.

El informe señala que Europa sigue liderando a nivel mundial por sus niveles de paz generales, siendo Islandia el país al tope de la lista como el más pacífico. La mayoría de las mejoras en la paz están en los Balcanes, una zona que ha sido tradicionalmente la más turbulenta de la región. El reporte dice que la tensión entre Ucrania y Rusia es un posible punto de conflicto en el futuro. Este último país sigue siendo el menos pacífico de la región y uno de los de peores a nivel global, en el puesto 152. 

Por otro lado, Medio Oriente y el norte de Africa siguen estando en los titulares, ya que continúa la escalada de numerosos conflictos de la Primavera Arabe. Egipto y Siria son los dos países que ven deteriorarse más sus puntuaciones generales. Así, el primero ocupaba el puesto 74 de 138 naciones en 2008, manteniendo esa ubicación en 2011. En 2013, se ubicó en la posición 143 de un total de 162. Esto debido a la violencia que surgió tras la caída de Hosni Mubarak (1981-2011) y la posterior destitución del mandatario electo Mohamed Morsi (junio de 2012 a julio de 2013). En el caso de Siria, el país ha vivido enfrentamientos entre las fuerzas de gobierno y los rebeldes desde marzo de 2011 y en la actualidad también enfrenta la llegada del grupo Estado Islámico. De esta manera, el país  pasó de ubicarse en el puesto 77 en 2008 al  último lugar en 2013, reemplazando a Somalia.

Norteamérica registra una puntuación ligeramente deteriorada, sobre todo por el aumento de la actividad terrorista en EE.UU. en relación al ataque en el maratón de Boston, en abril de 2013.

En tanto, México, que vive un conflicto por el tráfico de droga, cae ligeramente debido a un aumento en el número de responsables de seguridad interna. Por otra parte, Uruguay, que mantiene su posición como país más pacífico de la región, ve su puntuación deteriorarse como resultado de un incremento en el número de policías y fuerzas de seguridad. Por su parte, Colombia (150) y Venezuela (129) tienen las puntuaciones más bajas por las tensiones internas. Si bien el informe destaca la mejora en Argentina en el ranking, que pasó del puesto 59 al 43 en un año, señala que es uno de los lugares donde es más probable que la paz se deteriore en los próximos dos años.