La Copa Sudamericana permite cada año conocer equipos no muy nombrados fuera de sus propios países. Pero en esta edición, al aumentar los participantes, aparecieron clubes con poca historia incluso en sus propias fronteras. Algunos serán rivales de los chilenos.
Fuerza amarilla. Equipo ecuatoriano de Machala, fundado en diciembre de 1999, llega a la primera división en 2015 y clasifica a la Sudamericana tras ubicarse en el octavo puesto, el último que daba pasajes al torneo continental. La Banana Mecánica juega en el estadio 9 de mayo, con capacidad para 20 mil personas. Es el rival de O'Higgins y tiene en el plantel a Eduardo Morante, de ingrato paso por Universidad de Chile.
Patriotas Boyacá. El rival de Everton fue fundado en 2003. Con sede en Tunja, llega a la Primera división colombiana en 2011. Juega en el estadio La Independencia, con capacidad para 30 mil personas y clasificó por terminar cuarto en la tabla de reclasificación.
Comerciantes Unidos. Equipo peruano fundado en 2002, que sólo desde el año pasado juega en la Primera división, terminando sexto, lo que permitió clasificar a la Sudamericana. Las Aguilas son de la ciudad de Cutervo, donde se ubica el estadio Juan Maldonado Gamarra, para 10 mil espectadores.
Deportivo Petrolero. Club boliviano de la ciudad de Yacuiba. Fundado en 2000, juega en el estadio Federico Ibarra Olarte (9 mil personas), pero para la Sudamericana utilizará el Olímpico de Yacuiba, para 27 mil espectadores, que se inaugura este mes. Clasificó tras finalizar octavo en la tabla acumulada.
Atlético Venezuela. El rival de Palestino es otro club con pocos años de existencia, ya que se fundó en 2009. Juega en el esatdio Brígido Iriarte (10 mil espectadores) y tiene dos títulos de segunda división. Clasifició por ser el mejor ubicado del Clausura 2016 sin cupo en la Libertadores.