Los detalles de la tensa disputa entre Yuraszeck y Estévez tras el bochorno del clásico

Jaime Estévez, presidente de Cruzados, y José María Buljubasich, gerente deportivo de Universidad Católica, estaban indignados en la puerta de ingreso al sector donde se ubican el camarín de Universidad de Chile y el de los árbitros. Recién había ingresado José Yuraszeck y, literalmente, tras encogerse de hombros, les cerró la puerta en la cara a los representantes de la UC. Así empezó el otro duelo, el dirigencial, en los pasillos del Nacional.

Estévez contaba después que los guardias le explicaban que ellos estaban trabajando ese día para la "U" y que tenían la orden de no dejar pasar a nadie. Mientras, Yuraszeck conversaba con el árbitro Enrique Osses y con el gerente de programación de la ANFP, René Rosas.

Tras los forcejeos, Estévez y Buljubasich finalmente también pudieron reunirse con Osses y Rosas, "gracias a la intervención de la ANFP", según explicó el mismo presidente de Cruzados.

"Yuraszeck habló a solas con Osses. Entró y a nosotros nos negaron el ingreso. Pienso que todos tenemos el mismo derecho. O somos todos o ninguno", reclamó tras la cita Buljubasich, mientras que Estévez dijo que "fue una actitud descortés".

En la conversación, Yuraszeck propuso jugar este lunes al mediodía. No hubo respuesta inmediata de la UC y la ANFP validó la idea. De hecho, en un comunicado de Azul Azul, enviado más tarde, se asegura que todas las partes estuvieron de acuerdo.

Minutos después de la improvisada reunión, el primero en dar una información oficial es el propio presidente de la "U", y no un representante de la Asociación, quien asegura el día y la hora para continuar el partido.

Pero los cruzados no se quedaron tranquilos y mientras se informaba que el duelo se terminaría a las 15.00 y no al mediodía, en la UC buscaron antecedentes y se enviaron a la ANFP para pedir que se diera por finalizado el partido. Los cruzados apelaban a la conducta de los hinchas, los fuegos artificiales y los exámenes a los que se sometió Meneses.

Públicamente, Estévez sólo decía que no se podía jugar este lunes, ya que sería una injusticia para Católica no contar con el volante.

Finalmente, la "U" no consiguió su objetivo de jugar hoy y la UC logró que la decisión se postergara hasta la reunión de directorio de hoy, donde se puede decidir que el partido no se termine y dar por ganador a Universidad Católica.