"Yo desperté en el segundo piso con los golpes que Mauricio Ortega estaba dando en el pasillo del segundo piso. Andaba en el auto con el hacha, yo los saqué porque mis sobrinos estaban llorando, él estaba enojado".
Así detalló Elvis Rifo en su declaración el día en que el único imputado de la brutal agresión de su hermana Nabila Rifo, irrumpió violentamente en su casa para increpar a la madre de sus dos hijos.
Pero dicho episodio es, además, uno de los antecedentes que existe en la investigación y que la Fiscalía apunta como un elemento que demostraría la conducta violenta de Ortega con Nabila antes del episodio en que ella fue brutalmente agredida, perdiendo sus ojos.
Según el documento de solicitud de audiencia de formalización, ese episodio ocurrió el 5 de junio de 2015 a las 07:30 de la mañana en la vivienda de propiedad de su entonces cuñado.
En ese momento, Ortega "portaba un hacha con la cual comenzó a golpear la puerta principal del inmueble". Al no lograr entrar de esa forma, se dirigió –según indica el reporte- "a la parte posterior del domicilio, rompiendo con el arma blanca la puerta de la cocina, ingresando sin la voluntad de su dueño al lugar".
Antes de abandonar el lugar, Mauricio Ortega le manifestó explícitamente a Nabila Rifo que la mataría.
El episodio que recordó el hermano de la joven es acreditado por la denuncia que realizó Rifo en aquella oportunidad. La presentación se realizó ese mismo día, aunque la audiencia de formalización ocurrió recién el 14 de agosto de ese año.
Esa vez, además, no hubo sentencia contra Ortega hasta el 18 de mayo de 2016, casi un año después de ocurrido el hecho, cuando encontraron a Nabila Rifo a pocas cuadras de la casa que posteriormente compartían.
Pese a esta revelación, Mauricio Ortega insiste en su inocencia e incluso asegura nunca haber maltratado a su ex pareja, declaración que se contradice con los hechos relatados por el hermano de la víctima e incluso con quienes compartieron con la pareja la noche en que ocurrió la agresión a Rifo.
Según la carpeta del caso, Katherine Rifo, hermana de la víctima, llegó en medio de una fuerte discusión ocurrida horas antes de que la joven madre fuera violentada, a buscar a sus sobrinos. Esa vez, "cuando iba saliendo, mi cuñado rompía diferentes objetos del inmueble, enojado porque en ese momento quería golpear a mi hermana", declaró a fiscalía.
Por otro lado, aunque no todos los asistentes vieron un intento de agresión directo sobre Nabila, sí coinciden en que Ortega pateaba la lavadora y le daba puñetazos al muro.
Cuatro días más tarde, Ortega fue privado de libertad como principal sospechoso de haber golpeado y arrancado los ojos a su ex pareja.