Poco para rescatar tiene Universidad Católica en este Torneo de Clausura. 13 puntos en 10 fechas tienen al bicampeón del fútbol chileno en un undécimo puesto que ni el más pesimista de sus hinchas esperaba. Varios factores han influido en esta merma de un conjunto que, salvo la salida de Nicolás Castillo a México, no sufrió grandes bajas en relación a la escuadra que deleitó a todos en 2016.
1- Poca profundidad: Católica es el equipo del fútbol chileno con más posesión de balón. Sumando sus 10 partidos, ha acumulado un 57,1% en la tenencia de pelota, algo que no se ha reflejado en tantas llegadas claras. Sí ha intentado varios tiros al arco, pero no ha logrado generar muchos mano a mano: lleva cinco en todo el torneo.
2- Falta de gol: El primer punto se liga con el segundo. Con 14 tantos, la UC está muy lejos del notable rendimiento goleador del campeonato pasado. En el Apertura, acumuló 37 goles, más del doble de los que tiene ahora. Una diferencia que se hace notar en la salida de Castillo. El encargado de reemplazarlo, Silva, solo lleva dos tantos.
3- Rotaciones en defensa: En la línea donde Salas ha realizadomás cambios es en la retaguardia. Como lateral derecho, ha ocupado a J.C Espinoza, Magnasco y a Álvarez, a quien ha utilizado como central junto a Lanaro, Kuscevic y Maripán. Las dos lesiones que Lanaro ha sufrido en el torneo lo han complicado en demasía. Luego de la caída ante Audax, acumula 18 goles en contra, los mismos que recibió en todo el Clausura 2016. Por la izquierda, Parot sí se ha logrado consolidar como un inamovible.
4- Falta de refuerzos: Católica se dedicó a invertir su dinero en retener a sus figuras más que en potenciarse. Solamente reemplazó a Castillo con la llegada de Santiago Silva, y no trajo más nombres de primer nivel en ninguna de las otras líneas. Se transformó en un elenco predecible al no tener nombres diferentes a los de 2016.
5- Bajas individuales: Ni Buonanotte, ni Kalinski ni Noir, los tres extranjeros que llegaron el segundo semestre del año pasado, han tenido la regularidad y brillantez del Apertura. Solo a cuentagotas. Maripán, otra de las revelaciones, ha bajado en su rendimiento, mientras Chapita Fuenzalida tampoco ha logrado brillar. Y ni siquiera ha podido aportar con goles, una faceta en la que siempre aparecía y que ahora la UC necesita con urgencia.