Más de 150 personas se dieron cita en el Movistar Arena en la junta ordinaria de accionistas de Universidad de Chile. Ahí se eligió por unanimidad y hasta 2016 a los 11 directores del club, siendo la única novedad la salida del rector de la Casa de Bello, Víctor Pérez, ingresando a la mesa el ingeniero de la misma casa de estudios Andrés Weintraub.

"Se tocaron todos los puntos; como el cambio de directorio, aprobación de la memoria y se dio a conocer, entre otras cosas, el estado financiero del club. Y se acordó repartir $ 27,33 por cada acción para todos los accionistas", aseveraba José Yuraszeck, presidente de la "U".

En la cita se detalló que en el 2012 los azules obtuvieron una utilidad neta de $ 4.281 millones, el mejor resultado en la historia de una sociedad anónima deportiva chilena.

Y logró por primera vez en el sexto año de gestión, mientras que antes Colo Colo lo había alcanzado en el tercer periodo (Cruzados nunca lo ha logrado).

En este escenario, la junta accionaria acordó distribuir el mencionado dividendo ($ 27,33) por cada acción, que corresponde a la distribución mínima del 30% de las utilidades conseguidas en el último ejercicio contable que les exige la ley, instancia que beneficiará a los casi 5.000 accionistas.

Y las cifras a percibir por los accionistas no serán menores. Así, por ejemplo, Sociedad de Inversiones Alpes Ltda., donde asoma como máximo controlador  Carlos Heller, sumará  en la repartición $ 241.834.697 producto de las 8.848.690 acciones que posee y que corresponden al 24,23% de la propiedad del club. Mientras, inversiones Santa Cecilia, que suma 8.241.629 de acciones (22,57% de la propiedad) y que maneja el timonel, logrará $ 225.243.720. Entre ambas sociedades, las dos mayores controladores del club, sumarán $467.078.417, casi un millón de dólares.

Los porcentajes de los 12 mayores accionistas del club alcanzan un 93,37% de la propiedad, siendo el 6,63% restante de los accionistas minoritarios.

Estos, gracias a su mencionado 6,63%, ostentan cerca de 2.421.247 en  número de acciones por lo que recibirán, en  conjunto, cerca de $ 66.172.680 en utilidades.

Modificar plan regulador

Los excelentes números de Azul Azul, los mejores en la historia de una SADP, permiten hacer caja para el estadio propio. Ya poseen más de US$ 10 millones para aquello, aunque los plazos pueden alargarse.

"Revisamos terrenos en diferentes comunas de Santiago, hicimos estudios de prefactibilidad a 49 y quedaron 16 en carrera. Ahora, hay tres con una muy buena posibilidad (Maipú es uno de ellos), pero el que se elija significa modificar el Plan Regulador Metropolitano de Santiago, lo cual puede tomar un tiempo más del que quisiéramos. Para construir un estadio hay que hacer modificaciones mayores. No nos ponemos plazos, porque no depende sólo de comprar un terreno. Están los recursos, pero depende  de la regulación urbana de Santiago o de una comuna en particular", cerró Yuraszeck.