Algunos los asocian a los efectos del cambio climático, otros dicen que son condiciones inusuales. Lo cierto es que en el último tiempo Chile ha sido afectado por fuertes ráfagas de viento con características de tornado, trombas marinas, vendavales y nevazones en el norte, que han dejado estragos a su paso.
Si bien no existe un registro oficial, la masificación de las comunicaciones ha facilitado que dichos fenómenos sean captados por los cuidadanos y conocidos por el resto de la población.
"Ultimamente se han registrado más, dado que ha habido una masificación de las comunicaciones. Ahora todo el mundo tiene un celular con cámara, el acceso a internet es mucho más grande, hay más información que en años anteriores, entonces esto ayuda a que estos fenómenos se propaguen más rápido, a mayor escala", dice Cristóbal Torres, del Centro Nacional de Análisis de la Dirección Meteorológica.
Aquí algunos ejemplos.
TORNADOS
El 22 de enero de 2005 se registró el fenómeno en una zona cercana a Ensenada, en los faldeos del Volcán Osorno, el cual tuvo una duración de unos 5 minutos y tocó tierra en al menos dos ocasiones.
Definido como "un viento fuerte similar a un tornado", el 9 de junio de 2007, un tornado destruyó al menos cinco viviendas en Lota.
En la web también existe el registro de un tornado fechado en febrero de 2008, en la Región del Maule.
Según Cristóbal Torres, el de Villarrica tuvo todas las características de un tornado, "pero no existe la evidencia de que haya sido un tornado, ya que no hubo registro del embudo. Además, no existen los implementos necesarios para catalogarlo".
Se habla, entonces, de un temporal de viento intenso, que alcanzó velocidades de entre 180 y 200 km/hr
TROMBAS MARINAS
Las trombas se producen en cuerpos de agua, por eso también son conocidas como tornados en el mar. Existen dos tipos: las tornádicas, que se forman sobre el agua o bien en tierra para luego pasar al medio acuoso, con vientos de hasta 512 kilómetros por hora; y las no tornádicas, de características similares, pero sin llegar a la categoría de tornados, alcanzando menos de 116 kilómetros por hora.
El 14 de junio del 2010 se registró una tromba marina en la costa de Lirquén, en la región del Biobío. El 12 de abril de 2011, afectó a la ciudad de Ancud, en la isla grande de Chiloé, causando cortes de luz, voladuras de techumbres, daños en inmuebles y el destrozo de ventanales.
El pasado 7 de junio, una tromba marina arrasó con un jardín infantil en el sector de Hualaihué, en la provincia de Palena, Región de Los Lagos.
Cristóbal Torres señala que la zona entre la VIII y la X Región es climatológicamente más propicia para que se formen este tipo de fenómenos, pero no por eso son comunes.