La derrota ante Deportes Temuco dejó en claro que Marco Antonio Figueroa no tendrá días fáciles en el Centro Deportivo Azul, donde deberá trabajar intensamente para interrumpir la racha de derrotas que le pena a Universidad de Chile, y que ya es histórica.
El gol de Patricio Salas a los 55 minutos extendió a seis la racha de derrotas consecutivas que arrastra la "U", considerando las caídas frente a Universidad Católica y Rangers por el torneo anterior, más los traspiés por la Copa Chile ante Concepción, Ñublense y Temuco, además del revés con Unión Española, en la Supercopa de Chile, encuentro que marcó el adiós de Darío Franco.
La seguidilla de derrotas sólo es superada por la campaña de 1949 y 1950, años en que los universitarios alcanzaron siete caídas en fila: dos en el torneo del 49 (Iberia y Wanderers) y cinco en el comienzo del certamen del 50 (Santiago Morning, Everton, Audax, Ferrobádminton y Unión Española).
"La mayoría de los muchachos me dejaron conforme y tenemos que enfocarnos en mejorar el rendimiento colectivo", señaló el carismático estratega una vez finalizado el encuentro con los albiverdes. Sin embargo, lo cierto es que entre sus misiones también estará levantar algunas individualidades que aún no logran justificar su llegada al club del león.
Uno de los casos más emblemáticos es el de Ramón Fernández, uno que no está cerca de ser el conductor por el que la "U" pagó 1,6 millones de dolares. Tras bajas actuaciones en el proceso de Darío Franco, terminó siendo postergado y lejos de ser una alternativa real para su compatriota en la dirección del equipo.
La llegada del "Fantasma" promete darle un nuevo aire al "10" azul. Desde su primeras declaraciones el ex DT loíno señaló que buscará potenciar a Fernández después de su casi nula participación en el semestre pasado. Sin embargo, no aprobó su primer examen y cuajó un mediocre rendimiento en el duelo ante los temuquenses. Pese a presentar un juego más vistoso y ofrecer mayor movilidad, su trabajo no produjo mayores aportes.
A favor del trasandino, los delanteros tampoco tuvieron un alto rendimiento, y la labor del volante creativo pasó más desapercibida con pocas opciones de pase para profundizar. Precisamente en este aspecto, la función que ha desempeñado Cesar Cortés en la ofensiva estudiantil es una de las que carga con más críticas tras una temporada en el club.
El ex Huachipato llegó para cubrir la posición de puntero izquierdo, una zona en que la que han pasado muchos nombres, pero ninguno con éxito, y de mantener su nivel, el "Chester" parece condenado a ser uno más en la lista.
Desaparecido por ratos, y errático en la toma de decisiones cuando alcanza un mayor protagonismo, Cortés tiene como misión repuntar y alcanzar el nivel que lo llevó a ser pieza clave en el Huachipato que levantó la copa del Clausura 2012, si quiere llegar a ser fijo en el esquema de Figueroa.
Los problemas no solo están desde la mitad de cancha hacia arriba, pues las descoordinaciones en el fondo también pesaron en el partido ante Deportes Temuco. Figueroa hizo redebutar una línea de tres en el "Romántico Viajero" con Juan Ignacio Sills cumpliendo el rol de líbero.
El trasandino recien llegado fue el reflejo de las fragilidades de la zaga azul, y pese a solo sumar tres partidos con su nueva casaquilla, ya ha sembrado dudas con respecto a su calidad. La poca confianza que ha entregado en una posición clave habla de cuán grande le está quedando el cartel de "defensor de categoría", tal como se anunció sería la consigna de la búsqueda de refuerzos que terminó en su contratación.
Otro de los que sacó la voz al finalizar el encuentro por Copa Chile fue el referente y capitán azul, José Rojas, quién señaló que "hay que seguir trabajando para sacar esto adelante. Este equipo no merece tantas derrotas". Poco tiempo dispondrán, pues solo restan tres días de preparación para su próximo encuentro oficial, ante Deportes Concepción, donde el trabajo del nuevo técnico Marco Antonio Figueroa tendrá que reflejarse en cancha, o delo contrario seguirán extendiendo una racha para el olvido.